Kontuz
Rodrigo Rato, vicepresidente español, director del FMI, panameño, (Foto de Joaquín Abad) |
Aunque suene ampuloso, el proceso democratizador en España se ha convertido en ideologizante, para entendernos mejor: en un procedimiento partidario; por el cual se vota al partido político con el que simpatiza el votante, sin importar, o importando muy poco, que los responsables del mismo sean unos forajidos que cometen todo tipo de delitos.
Comenzaremos por delitos sexuales (consentidos por la víctima), por ser del agrado, en cuanto al morbo que conlleva, de muchos lectores; los jefes de algunos partidos se dedican, a tiempo completo, a seducir (bajo falsas promesas, o incluso no tan falsas) a jóvenes ‘beldades’ que recalan en las formaciones políticas sin otro bagaje que su atractivo personal; ya estamos hablando de pseudo violaciones propiciadas por vidas de lujo y oropel en congresos satánicos, comedores engalanados, hoteles de relumbrón, adrenalina reposada en mullidos asientos de autos de gama (muy) alta, y testosterona ‘disparada’ por la excitación congresual, en la que imbecilidades varias veces repetidas, cual canciones de verano de los ‘80’, llegan a calar en el cerebelo de los asistentes y asistentas, todas ellas con ropaje íntimo a estrenar en la convención. Todo ello con nuestro dinero, claro.
Disponemos ya de suficiente información de lo ocurrido en los dos grandes partidos a lo largo de estas cuatros décadas; con nombres y apellidos, de ellos y ellas, de todas sus trayectorias y cómo se produjeron ascensos y consolidaciones; irán saliendo a la luz con el paso del tiempo, al igual que está ocurriendo con los ‘Papeles de Panamá’ o con la declaración de la renta de ex presidentes, cuya profesión era, precisamente, la de Inspectores de Hacienda (las mayúsculas son por el cargo, no por la persona), ex presidente del Gobierno Español que, en vez de pedir ‘disculpas’ por el error, va y se cabrea y ‘tira’ de querella criminal contra la Hacienda Pública (nada menos). En CLM y Comunidad de Madrid resulta especialmente penoso, y tenemos las listas. Altos cargos del PP que se han ‘beneficiado’ a una o varias, sin solución de continuidad, y también los nombres de las que fueron ‘colocadas’ en ese engranaje perverso de lo partidario, en función de los servicios prestados. La palma se la lleva el PP y sus ‘bellezones’, aunque hemos detectado, desde lo de Sánchez, un aumento de cuota de ‘beldades’ en sus portavocías, empezando por el propio Pedro Sánchez, marketing en estado puro.
Anoche pedía Millás: ¡Quedémonos todos en la cama, a ver que hacen éstos!
Del amor al odio solo hay un paso, digo un congreso, (Foto 'andalucesdiario.es') |
Delitos de ‘Nepotismo’, es decir, contratación de familiares para la función pública por el mero hecho de serlo; y ya no hablamos de los corruptos peperos, que se llevan la palma, sino de los Ayuntamientos de Madrid Y Barcelona, gobernados por los nuevos políticos (españoles, a fin de cuentas).
Delitos de ‘Contratación fraudulenta’ de todo tipo de productos y satisfacción de necesidades; desde ferreterías a farmacias, pasando por proveedores de ropa, calzado, prestación bancaria, despachos de abogados afines; todo ello sin el menor respeto por la libre concurrencia o igualdad de oportunidades.
Delitos de ‘Corrupción’, como nunca se había conocido, desde la propia familia real (con minúscula) hasta cientos de alcaldes y miles de concejales; presidentes de diputaciones en cascada, no uno ni dos, y no digamos ya de directivos de empresas públicas.
Sería ocioso seguir con el tema de la corrupción, política y empresarial, por conocida
Uno se pregunta por la conciencia laxa o relajada de millones de votantes que continúan depositando la papeleta de su partido, aún repleto de facinerosos, sin ser conscientes de que sus hijos, que están al loro de lo que se ‘cuece’ en sus casas, a la hora del huevo con patatas fritas y el móvil en la otra mano del tenedor, se plantean si sus progenitores son tontos o gilipollas: ¡Las dos cosas, mi general!
PS – Así como de repente, nos han venido a la cabeza, aquí en nuestra tierra, dos excepciones a la regla: Manzanares, con la pérdida de tres de sus nueve concejales, en horas 24, o sea en una legislatura (olé los votantes) y Tomelloso, con la pérdida de seis de sus trece ediles; en ambas ciudades las pérdidas o extravíos con indignidad política corresponden al Partido Popular. La tipología delictual queda para más adelante. Digno y cívico vecindario en ambos pueblos manchegos. Siempre nos queda la excepción que confirma la regla.
Dos alternativas: votar a otros partidos o abstenerse; no más forajidos en casa