lunes, 8 de mayo de 2017

Alternativa a los CIE Centro de Internamiento de Extranjeros (2/3)

MLFA
África (E y W) 1969-1972

Familia de refugiados sirios en Melilla posando para 'Save the Children' con toda dignidad.

Conviene ser pedagógico en un asunto tan importante como la Inmigración, tan proclive a la demagogia política y social, debido, fundamentalmente, a la ausencia de alternativas; dos son los grandes ejes sobre los que bascula la ‘inmigración’ en tiempos como el actual: los ‘refugiados’ (que antaño se denominaban ‘políticos’), bien por motivos de ‘guerra’ en sus países, o por la ‘hambruna’ que asola el continente africano desde los años “90” y los ‘inmigrantes económicos’, éstos por razón de voluntad de mejora en sus proyectos de vida, algo perfectamente legítimo. El 'calentamiento global' tiene mucho que ver con las 'hambrunas' de las tres últimas décadas, aunque éste no sea el tema que nos ocupa hoy.

Éstos últimos, llamados ‘Sin Papeles’, fueron bien recibidos por muchos empresarios

Durante el período comprendido entre 1990 y 2007 el sistema utilizado fue el siguiente: se hacía la ‘vista gorda’ respecto de la inmigración ‘irregular’ (que entonces se decía ‘ilegal’) porque la misma constituía una enorme bolsa de empleo barato. El primer paso consistía en contratar (sin contrato) al ‘irregular’ en condiciones de ‘semi-esclavitud’; al cabo de un año el empresario ‘emitía’ un certificado que informaba a la Policía de Asuntos Migratorios (conocida como Oficina de Extranjería), que el inmigrante había trabajado para su empresa durante ese período, y se ponía en marcha el proceso para la obtención de la tarjeta denominada ‘Permiso de Residencia’

El inmigrante ‘ilegal’ pasaba a ser ‘legal’, ello no era óbice para que siguiera 'explotado'


Aquella tarjeta ‘deseada’ tenía una validez de 4/5 años, (me ocupé de tramitar varias en CLM), período durante el cual venían obligados a residir en España; es decir, que no podían desplazarse a otros países europeos hasta que transcurrieran esos 5 años. Como es obvio, muchos de ellos ‘pasaron’ de obtener la tarjeta y se ‘largaron’ a otros países europeos. España era una ‘cutrez’ para miles de magrebíes (en catalán ‘magrebines’) rumanos, búlgaros y ucranianos y se dieron el ‘piro’ a la primera de cambio.

Los que se resistían a dejar España eran los latinoamericanos, que entraban legalmente

Aunque la entrada de estos últimos era ‘legal’, con presentación de ‘visado’ tornaba en ‘ilegal’ a los pocos meses y se ponían a la cola de Extranjería para obtener los permisos de residencia temporales. En Cataluña no los querían porque hablaban ‘castellano’, los de CIU (banda criminal) preferían ‘magrebines’ para poder enseñarles, directamente, la lengua catalana.

Hay diferencias entre ‘refugio’ y ‘asilo’ aunque no a efectos de nuestra alternativa CAE

Tanto el ‘refugiado’ por razones de guerra o hambruna, como el ‘asilado’ por motivos políticos, vienen protegidos por la Convención de Naciones Unidas sobre Refugiados de 1951 y por el Protocolo sobre el Estatuto de Refugiado de 1967 de la propia ONU y afecta a nuestro país. El tratamiento de estas personas que huyen de sus países (refugiados) o que no pueden volver a ellos por miedo a represalias políticas (asilados) resulta diferenciado.

Existe una diferencia clara y terminante entre ‘Inmigrantes Económicos’ y ‘Refugiados’