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| Juez Salvador Alba: ¿Y el fiscal? No te preocupes: ¡Fiscalía que se joda! Realmente da miedo esto. (Foto 'eldiario.es') |
Los ciudadanos españoles contemplan asustados (en 2016) en las televisoras, cómo desde 2011 se había iniciado en España un retorno al totalitarismo; el PP oficiaba como partido único, negándose a aceptar cualquier idea (enmienda) que procediera del resto de los partidos democráticos. Amen de darle la vuelta entera a la legislación existente rebajando el techo de las libertades fundamentales para la convivencia en democracia.
Los catalanes lo vieron venir y se cobijaron en la independencia como salida de escape
También los vascos, que se adscribieron al desprecio social hacia lo español en todas sus vertientes, incluida la económica, al expandir sus empresas por el mundo, dejando de lado, en gran medida, carga de trabajo y yacimientos de empleo en nuestro país, la última empresa de referencia que se repliega a tierras vascas es ‘Eroski’, pero no es la única. Ello no quiere decir que Euskadi haya descubierto la autarquía (Franco desde 1940 a 1960), sino que ‘desprecia’ el mercado español por varias razones: legislaciones muy obsoletas que se solapan unas con otras; falta de mano obra especializada y, por consiguiente, baja productividad; coimas, mordidas, corrupción a todos los niveles, como en el franquismo, pero a lo bestia. Incluida la libertad de acceso a contratos públicos, sin 'cotizar' por ello a políticos del PP y del PSOE. Y a la falta de libertades públicas, algo que nunca han aceptado los vascos sino por la fuerza.
La merma de libertades reales es notoria y ello supone un freno a la ilusión por emprender, en definitiva por crear empleo, fuera de las ‘fronteras’ del propio País Vasco. La Independencia, no tan explícita como en Cataluña, va cogiendo cuerpo, al igual que en Galicia, que ya dedica el grueso de su producción a la exportación, y que ha convertido a Portugal en su mercado natural.
Podemos asegurar que las tres CCAA citadas quieren marcharse de ‘esta’ España
Algo muy diferente a querer marcharse de España; tiene mucha razón Pablo Iglesias al decir que con un gobierno de progreso, es decir, cautivo y desarmado este inaudito ‘protofascismo’ pepero; vascos, catalanes y gallegos, seguirían anclados en España, después de celebrar las oportunas consultas a sus respectivas ciudadanías. Refrendos que, en condiciones de libertad real, resultarían proclives a permanecer unidos, pero que nos servirían de lección magistral para proceder a una reforma constitucional que blindara derechos y libertades, de tal manera que no volvieran a repetirse estos ensayos de vuelta al pasado como los protagonizados por este PP totalitario y liberticida, prepotente y corrupto, que ha llegado al punto de infundir miedo – como en los años ‘50’ y ‘60’ de infausto recuerdo – a la población.
Jueces españoles han calificado al PP como organización creada para delinquir
Nadie en su sano juicio, que haya vivido la Transición española, podía imaginar, en el peor de sus sueños, que podía ocurrir algo así: “creada para delinquir”, o bien: “organización criminal”. Expuesto así de claro en autos judiciales.
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| Alberto Garzón de IU: "Yo soy comunista, pero 'Unidos Podemos' no lo es". (Foto y pie de foto de 'eldiario.es') |
Otra prueba del algodón que justificaría nuestros asertos, y en la que no estamos cayendo (en la cuenta) es que reverdece el vocablo ‘comunista’ como algo atrayente y moderno, siendo así que en España no hay comunistas, todos ellos cabrían en un monovolumen de la Seat. Ocurre que ante el auge del totalitarismo, que implica el desprecio hacia la ciudadanía, algo que resulta obvio entre Rajoy y los suyos, y el intento de ocultar la corrupción de la que han vivido todos ellos, unos por acción y los otros por omisión; parte de la población utiliza la expresión ‘comunismo’ (idealizada) de forma que se sienten protegidos de la ‘banda’ que les anuncian los jueces en sus autos.
'Podemos' no es comunismo; Izquierda Unida dejará el comunismo, ya lo verán
PS – Claro que para mantener España unida, con demócratas y sin comunistas, que ya no harían falta, hace falta un gobierno de progreso y la disolución del PP (como hace el Ministerio del Interior con las bandas criminales, siempre que puede). Miles de agentes policiales; tanto de la Policía Nacional como de la Benemérita Guardia Civil, no digamos ya de las Policías Autonómicas y Municipales, rechazan de plano al PP, y no les duelen prendas en reconocerlo públicamente.
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