Rescate de 34 tripulantes de la goleta “Gloria” en el Atlántico Norte

MLFA-CMM 
Buque 'Monte Zapola'

Buque de carga a granel "Monte Zapola" entrando en el puerto de Pasajes.

El buque tipo “bulk carrier” (carga a granel) nombrado “Monte Zapola” era el más moderno de la serie “Z” de los astilleros Euskalduna de Bilbao; y pertenecía a la ‘Naviera Aznar’ (escisión de la ‘Compañía Sota y Aznar’, al verse obligado a huir de España el socio Ramón de la Sota, destacado nacionalista vasco, que, posteriormente, creó la ‘Naviera Sokoa’ en Francia). La serie “Z” estaba compuesta por los buques: “Monte Zapola”, “Monte Zaraya”, “Monte Zamburu” y “Monte Zalama”; el ‘Zapola’ era el buque insignia de la serie. Nuestro primer viaje fue a los Grandes Lagos del Canadá, a por un cargamento de 24.000 toneladas de trigo, el barco calaba 10 metros, con una eslora de 183 metros y una manga de 24 metros. Había sido diseñado para las esclusas de los grandes lagos de Canadá y EEUU; pero alguien equivocó la ubicación exacta de los dos grandes botes salvavidas, cuyos pescantes sobresalían del casco, como pequeñas alas de mariposa, que quebraron al entrar en la primera de las esclusas de la cuenca del San Lorenzo. Yo hacía prácticas de mar para obtener el título de Piloto. Primero embarqué en el ‘Monte Peñalara’; luego fui trasbordado al ‘Monte Zapola’; Canadá, Indonesia y Argentina. Siempre con el viejo capitán CF. 

En los buques de Sokoa (‘mendis’) encontraron refugio miembros de la banda ETA 

Al capitán CF – una gran persona con pocos conocimientos sobre seguridad en la mar – no se le ocurrió otra cosa que apear los dos botes salvavidas (descoyuntados) de los pescantes y estibarlos en cubierta; ello suponía que haríamos el viaje de vuelta sin botes salvavidas. En España era habitual que los capitanes actuaran al dictado de los armadores – verdaderos depredadores del crédito marítimo que les concedía el general con largueza, de hecho su especialidad no era el tráfico marítimo, sino la pura y dura especulación en la compra y venta de buques – no eran armadores. Estábamos ya en el tardofranquismo, con el general viejo y enfermo; había que ‘hacer caja’ que venían los ‘rojos’ a saldar cuentas… ¡y los nacionalistas, claro, a recuperar lo expoliado! 

En el caso de Aznar era más descarado; sabía que – sin el general – volvería Sota a por lo suyo 

Detalle del palacio de Sota donde estuvo ubicada la Comandancia de Marina de Bilbao.

Don Eduardo (como lo llamaban los tripulantes) llegó a tener 48 buques; a mediados de la década de los “80” los había convertido en empresas de lavandería por toda la geografía española; la naviera quebró en 1983. La venta más espectacular fue la de los buques de lujo ‘Monte Toledo’ y ‘Monte Granada’ al loco Gadafi; don Eduardo no llegó a explotarlos, el amigo libio de Josemari tampoco. Compraba con créditos ‘blandos’, (crédito naval del 80%), y vendía al mejor postor; posteriormente invertía en lavanderías, tintorerías y otros negocios dispares, entre ellos 'Remolcadores Ibaizábal', a nombre de sus familiares y testaferros amigos. Formé parte – como ya les dije – de la tripulación que llevó el ‘Monte Toledo’ a Trípoli, y pude ver a marineros hechos y derechos, verdaderos lobos de mar, llorando como ‘viudas de aldea gallega’. Eran conscientes de que ‘don Eduardo’ les dejaría a todos en la calle; como así fue en los ‘80’. Resulta una obviedad informar a los lectores de que la familia Aznar tiene una fortuna en varios países; y (en su conciencia) varios cientos de tripulantes fallecidos en los numerosos naufragios de su flota mercante (entre 200 y 300). Ya les pasaré datos precisos sobre los naufragios y las causas que motivaron los mismos. 

Pude embarcar en Sokoa; pero cómo le dices al de ETA: ¡Pon rumbo 267º! 

Como todos los vascos saben; el naviero Ramón de la Sota (que era todo un armador desde la cuna) volvió ‘a por lo suyo’. No encontró barcos en Bilbao y no había lavanderías de don Eduardo, pero recuperó los mejores edificios y palacetes de Bilbao, que eran suyos antes de Franco, incluido el edificio que albergaba la Comandancia de Marina de Bilbao. Publicaré algunas fotos de entonces, aunque no son de calidad, como es obvio. Paso a relatarles el rescate de la goleta ‘Gloria’ y sus 34 tripulantes en área central del Atlántico Norte; recuerden esto los que hayan parado de leer para acercarse al chiringuito de la playa: ¡los botes salvavidas no podían ser arriados! 

Las grúas no servían para tal menester; el temporal era muy duro: ¡Several gale 9/10! 

Bote salvavidas en su pescante

La llamada de socorro la recibimos de madrugada; era el día 23 de febrero de 1969, navegábamos con mal tiempo, embarcando olas de 7 metros (íbamos cargados a tope, y en línea Plimsoll de máxima carga Atlántico Norte Invierno) que recalaban provenientes del NE y nos obligaban a capear amurados a la banda de babor, nuestro puerto de destino era Hamburgo. El capitán CF – de 72 años de edad – entró en modo pánico; no podía ordenar arriar los botes salvavidas (quebrados y estibados en la cubierta); se había negado a realizar las oportunas reparaciones en Montreal, aunque aclaro que la negativa procedía de Bilbao, de aquel cabrón de Inspector General PA que tenía a los capitanes sometidos al dictado caprichoso de don Eduardo, que tenía prisa por traer el trigo a los alemanes. Y que no era un ‘armador’, su profesión era ser amigo del Caudillo; pertenecía a su círculo más íntimo. Franco tenía varios ‘círculos’ como los de ‘Podemos’. ‘Fascismo’ y ‘Comunismo’ eran pleonasmo político y eso se hereda; hoy son los de VOX y los de ‘Podemos’. 

“Gloria” reportó 34 tripulantes, 20 de ellos alumnos de Náutica

Era evidente que no se trataba del “Juan Sebastián Elcano”, barco que ha superado cientos de temporales durísimos. El “Gloria” tenía 65 metros de eslora, dos palos y una jarcia de trabajo con gran superficie de velamen; esta era la única información recibida por nuestro oficial radio EMM (de 73 años), envuelto en una manta; un fantasma recorriendo el puente como un murciélago. Nos encontrábamos a 100 millas de la goleta; a unas 13 horas con aquel mal tiempo.

Buque accediendo a la esclusa; aproaches al puerto de Detroit (USA).

Con el capitán desolado y el viejo TSH amarrado a la mesa del telégrafo; nos reunimos con los maquinistas para tomar la decisión más adecuada a la situación, con viento arreciando por momentos; toda la tripulación – vascos y gallegos – estaban listos (eran gente muy templada y experta) y – de motu propio – se habían dotado de chalecos salvavidas y situado junto a los fusiles lanzacabos y las balsas salvavidas de apertura retardada, que se desplegaban al caer al agua. Yo tenía la impresión de que los náufragos seríamos nosotros, no los de la goleta que podían irse al fondo, por el estado en que se encontraba aquella embarcación, al decir de sus oficiales por la radio. Decían que estaban en condición de zozobra y a un descuartelar, con algún rizo en la mesana. 

La maniobra consistía en saltar al agua y rescatarlos desde las balsas, como atunes 

Buque frigorífico japonés de alta velocidad (30 nudos), preparado para navegación meteorológica.

En medio de la reunión; proa al buque en peligro de hundimiento y con el capitán fuera de control, el viejo radiotelegrafista informó del reporte de un buque frigorífico japonés que se dirigía hacia la goleta a toda máquina. Inmediatamente nos vino a la cabeza la construcción de buques rápidos en Japón; ellos inventaron la ‘navegación meteorológica’, consistía en dotar a sus barcos de mayor velocidad para poder ‘esquivar’ los temporales o galernas cambiando de rumbo y ‘rodeándolos’ (maniobra típica en aviación civil). 

La presencia en el área de salvamento del barco japonés nos levantó el ánimo; podríamos ‘cederle el paso’ y que se ocupara él del salvamento de los colombianos. El capitán dio orden de moderar la máquina y anotó en el diario de navegación que lo hacía por razones de seguridad. 

Motovelero capeando el temporal en el Golfo de Vizcaya; velamen arriado y trincado.

Los ‘japos’ se dieron cuenta de la jugada (en sus radares) y pidieron explicaciones; obligamos a responder al viejo telegrafista – que no hablaba inglés y parecía estar loco por las chorradas que transmitía al oficial radio japonés – hasta el punto de que le cerraron la comunicación vía telégrafo y los dos buques seguimos a rumbo de encuentro con la goleta; con las balsas preparadas y los fusiles lanzacabos con su munición para tratar de alcanzar la borda del velero con un andarivel (no habría servido de nada, no había donde enganchar el cable en un velero a punto de zozobra. 

Rezamos todos para que los ‘japos’ siguieran a toda máquina y el Señor nos escuchó 

Las fotos fueron requisadas por el capitán siguiendo órdenes del armador. Galeones museo de Londres.

A mediodía alcanzamos el punto de encuentro; la escena era dantesca, la goleta hundía su costado de babor en el agua, a punto de dar el vuelco final; el buque japonés no respondió a nuestras llamadas por onda corta y telegrafía, eso nos dio a entender que habían rescatado a toda la tripulación. Entrada la noche, recuperado el rumbo, nos telegrafió el ‘Coast Guard’ americano para darnos las gracias. Nunca se enteraron de lo ocurrido a bordo del “Monte Zapola” de la matrícula de Bilbao. 

En Hamburgo desembarcó el oficial TSH; era de Bermeo (manicomio de Santa Águeda) 

Goleta de porte similar; fotografía tomada en la 'Costa da Morte' gallega, Fisterra.

Aunque la ministra Calvo no lo crea; las reglas del Mar obligan a los capitanes a acudir en auxilio y rescate de personas en riesgo de naufragio o de cualquier avatar náutico que ponga sus vidas en peligro. Ningún gobierno puede prohibir el rescate o salvamento de personas en la mar; el Derecho Marítimo lo contempla desde tiempo inmemorial; en los tiempos actuales viene ratificado en los Convenios internacionales de CONVEMAR y SOLAS, entre otros. Sólo una ‘incontinente verbal’ como la vicepresidenta Carmen Calvo es capaz de decir semejante majadería; claro que van una tras otra. 

“El dinero público no es de nadie” y el “Open Arms tiene prohibido rescatar náufragos” 

Esclusa de acceso al lago Michigan; observen el ajuste del casco con las paredes  de la esclusa.

En Europa no se entiende que una ‘incapaz’ de este calibre pueda continuar de vicepresidenta del Gobierno de España; quizás no conocen bien (en la UE) al propio presidente, su jefe. A ‘Leyres’ y ‘Pajines’ el tal Aguado podrá añadir: y ‘Calvos’…; el petimetre de ‘Ciudadanos’ acierta con las tres lumbreras ‘de cuota’. Y olvida a la famosa Teresa que Azuer Digital apodaba “625 líneas”, a quien conocí en Barcelona el día de su toma de posesión como juez por el ‘cuarto turno’, (quedé espantado), es decir sin oposiciones; nombrada por el dedo socialista; otra ‘lumbrera’, en este caso jurídica, además de política. Al día siguiente volvió al decanato para solicitar la excedencia como juez y volver a Madrid con ZP. Hoy, con el sueldo de 9.000 € al mes en el Consejo de Estado, se ha ‘borrado’ las 625 líneas. La tal Viviana era sobrina de Cháves, el de los ERE, también conocido en nuestro digital como ‘Netol’. Y la Leyre era muy amiga de esta Teresa – sin líneas - de la que hablamos.

Los políticos 'miembros' compiten en mediocridad e ineficiencia con las políticas 'miembras'

Buque 'Ciudad de Tarifa' vendido a los griegos y hundido frente a Ibiza, la entrega la realizó quien suscribe.

PS - En función del tiempo que nos ocupe la preparación del juicio "Concejala del PP", que corre por cuenta nuestra, a la vista del elenco de abogados designados por los jueces (del que se salva el letrado correspondiente al juicio "Caso El Cruce"), y con el debido respeto al letrado que aún no ha sido designado; publicaremos antes de la vuelta al cole: ¡Naufragio del ML Fortuna! cuyo pecio descansa a unas 200 millas de 'Titanic'; y el ¡Naufragio provocado del Apollon! (ex Ciudad de Tarifa) al sur de Ibiza.

Hemos decidido publicar "Zapola" sin corregir un ápice sobre su armador 'don Eduardo'