No hay médico, fuera de la especialidad deportiva, que consintiera la humillación provocada por Márquez. El ejemplo para jóvenes es brutal; pueden tomarse a broma lesiones graves: lo hace su ídolo el charnego. La humillación a los médicos se ha producido en Jerez (Andalucía): ¡dónde si no! (En Catalunya y resto de circuitos europeos los responsables le habrían prohibido participar en la carrera) (Y al final el muchacho travieso y consentido se la ha tenido que envainar; y volver a desmontar su circo) (El joven piloto, un jodido suicida ambicioso patológico, no es consciente de que ha comenzado su declive) |