jueves, 30 de junio de 2022

El "Aita Mari": último eslabón de la cadena de la inmigración ilegal

 MLFA - CMM - Área de Refugiados Políticos - Sur de Europa.

Cubierta del buque pesquero reconvertido "Aita Mari" hace dos semanas en aguas de Libia y Lampedusa.

Resulta obvio de toda obviedad que el buque pesquero reconvertido en barco de salvamento y rescate "Aita Mari" es colaborador necesario en el tráfico ilegal de personas procedentes de África con destino a Europa. Estaremos de acuerdo en que su actividad 'ilegal a todas luces' se realiza bajo unos criterios filantrópicos y humanitarios (tan 'humanitarios' como supondría proteger y sustraer a la acción de la Justicia a un delincuente pobre y con familia).

Esta colaboración necesaria para perpetrar un delito se hace con 'publicidad' con reportero de EiTB a bordo

¿Por qué hablamos de presunto 'delito' y de 'ilegalidad' manifiesta? Lo explico sin grandes ditirambos, de forma que se entienda bien por los cientos de lectores preocupados por este tema de la inmigración ilegal (lo de 'irregular' es un eufemismo buenista y absurdo, amen de maniqueo).

El "Aita Mari" atracando en el muelle de Lampedusa con 176 inmigrantes a bordo.

Los traficantes de personas dotan de teléfono satelitario a un inmigrante de su confianza, o al patrón de la patera, de un teléfono 'satelitario', dispositivo carísimo solo al alcance de políticos, narcotraficantes y militares, empresarios viajeros y capitanes de buques mercantes; este móvil de la patera lleva memorizado el número de teléfono, también 'satelitario', del capitán o patrón de la embarcación de rescate; en este caso del "Aita Mari".

A través de ese teléfono recibe las coordenadas de la posición de la patera, adonde se dirige a toda máquina

Buque petrolero navegando 'a órdenes' y 'a velocidad reducida' con 300.000 toneladas de crudo, a la espera de recibir 'destino', o puerto de descarga.

Los buques mercantes salen de puerto con un 'destino' determinado; o bien lo hacen 'a órdenes', por ejemplo: navegue por el Atlántico Norte en tal dirección, a tal velocidad, y ya le daremos el destino cuando lo hayamos decidido; típico buque petrolero navegando por la medianía del Atlántico, a la espera de proceder a EEUU o a Europa, en función de quién sea el 'comprador' del crudo transportado. También puede recibir órdenes de proceder a tal destino 'a velocidad reducida' hasta que su cargamento esté dispuesto en el puerto de destino.

Solamente yates y embarcaciones deportivas pueden salir a la mar sin rumbo, a 'pasearse' simplemente

Volvamos al "Aita Mari"; el barco pertenece a una ONG (Organización No Gubernamental) sin ánimo de lucro, llamada SMH (Salvamento Marítimo Humanitario); esta decide el 'destino' - 'no destino' del barco, lo envía a 'patrullar' (como si fuera un buque de guerra) por aguas de países fallidos desde donde salen las 'pateras', al rescate de los inmigrantes a bordo de las mismas.

Recibida la posición de las mismas, a través del teléfono satelitario (los móviles convencionales no tienen cobertura más allá de 25/30 millas de la costa), se dirigen en busca de su objetivo. "Aita Mari" y una serie de buques parecidos introducen en Europa miles de inmigrantes ilegales cuya motivación no es otra que salir de la pobreza; en vez de quedarse en sus países e intentar sacarlos adelante, en lo social, económico y político.

Buque de Carga General "Alberta", guerra de secesión de Katanga en el Congo Zaire. Nos forramos, el riesgo era muy elevado. Ayudamos a Patricio Lumumba.

Presente en diferentes áreas de guerra; claro que mi motivación era económica, no iba a bordo del "Aita Mari"

Es obvio que deberán contar con ayuda de los países occidentales; a fin de cuentas fueron europeos quienes esquilmaron el continente africano durante siglos. Claro que entonces irían al paro los hombres y mujeres de esas ONG, perderían la sensación de morbo que conllevan las aventuras humanitarias descontroladas.

Teléfono satelitario del presidente Zelenski. Un dispositivo parecido viaja en la patera de Libia. Podríamos hablar de desesperación 'muy bien organizada'.

No se lo encuentran; reciben la posición y acuden al rescate, es decir 'colaboran' en el tráfico de personas
(Los países de la zona de rescate aceptarán desembarcar los inmigrantes presionados por sus ciudadanos)

PS - Todo buque que encuentre otra embarcación en peligro (una patera) o reciba un SOS de otra unidad tiene obligación de acudir en su auxilio, si no lo hace cometería un delito de denegación de auxilio. Este no es el caso del "Aita Mari", último eslabón de una cadena mafiosa de tráfico ilegal de personas. Le guste a los de EiTB o no les guste.