MLFA
La retirada de 900 contenedores de basura de las calles de Barcelona para que no los quemen unos animales (ex compañeros de la alcaldesa Ada Colau) es, cuando menos, surrealista. Amen de cobarde; ella está en el afán de quedar bien con tirios y troyanos, aunque el problema se agravará cuando estos jóvenes borrokas comiencen a quemar coches; porque ¿dónde guardaríamos miles de coches, Ada?
Los jóvenes, dice la Colau, están muy 'tensos' porque no pueden organizar 'botellones'... ¡y a dar ostias!