MLFA
La OPE (Operación Paso del Estrecho) de 2019: ¡3.300.000 personas y 250.000 vehículos! entre Junio y Agosto.
Tres eran los sectores que conformaban la 'Economía Sumergida' en el Área del Estrecho de Gibraltar y sus dos hinterland: Sur de España y Norte de Marruecos. El primero era el 'Matuteo', seguido del 'Contrabando' y del 'Trueque'. Suponían una evasión de impuestos de proporciones considerables. Se actuaba con conciencia 'laxa o relajada' y no se consideraban 'delitos' por parte de la ciudadanía fronteriza. El calificativo de 'delito' comenzó a usarse cuando apareció el 'narcotráfico'; rechazado de plano por contrabandistas y matuteros, también por los del 'trueque' y toda clase de 'mercheros-payos'. Los 'narcos' del Estrecho los importamos de Galicia y de Marruecos a partir de finales de los años '90'. Respecto de nuestros vecinos; qué duda cabe que Hasan II se tomaba más en serio que su hijo Mohamed VI el gravísimo problema del tráfico de estupefacientes; por cierto, Hasan II también se mostraba riguroso en el control del tráfico ilegal de personas. En mis años de frontera (1977-1985) no llegué a ver ninguna 'patera'. Desde 2016 he colaborado en el control lingüístico de inmigrantes llegados a bordo de más de 60 embarcaciones ilegales, de todo tipo y tamaño. A cambio de estos duros 'madrugones': desayunos pantagruélicos de chuletón y sartenadas de patatas fritas, regados con vino blanco del terreno.
Como consecuencia existía una vasta red de 'compra-venta' de artículos o productos 'Tax Free Hispano'
En cuanto al 'matuteo' hacía referencia; el vehículo de transporte de la mercancía es la propia persona, mayormente mujeres, los artículos que escondían en su cuerpo eran de lo más variado: 1 ó 2 botellas de whisky; 1 ó 2 cartones de cigarrillos rubios americanos; todo tipo de conservas desconocidas en España; quesos de bola; algún que otro reloj; calculadoras y aparatos de radio; y alguna prenda de ropa.
A finales de los '70' el matuteo daba de comer a 4.000 familias del Campo de Gibraltar (que se dice fácil)
Se trataba de una actividad ilícita; la 'matutera' hacía 2 ó 3 viajes a Ceuta cada día, desde Algeciras, y al atardecer entregaba la mercancía a sus patrocinadores, o ella misma vendía los artículos 'puerta a puerta'. Los agentes de la Guardia Civil, en funciones de 'Resguardo de Aduanas', hacían la 'vista gorda' en muchas ocasiones, lo hacían sin ánimo de lucro o de recibir 'mordidas'; simplemente por conciencia humanitaria de la grave situación socio-económica por la que atravesaba este área geográfica.
El contrabando era otra cosa; lo hacían pasajeros en sus automóviles y tripulantes de los ferrys de pasaje
Algunos tripulantes de las diferentes navieras que operaban en el Estrecho se dedicaban a la práctica del 'contrabando' (hasta el punto de no dar importancia al salario); lo hacían encompinchados con trabajadores del puerto o con algunos proveedores de servicios del propio barco. Esta práctica era habitual en las líneas de Algeciras, Ceuta, Almería, Melilla y Málaga. Curiosamente, los grandes 'capos' del contrabando en el Estrecho y Mar de Alborán (nada que ver con los actuales 'capos' de la droga, claro está) estaban 'incrustados' en los sindicatos del sector: conseguían 'poder' sobre los tripulantes, en forma de destinos y rutas cerca de sus domicilios y cierta impunidad. A las navieras les interesaba tener contentos a algunos de estos pájaros del sindicalismo corrupto; ellos (los delegados sindicales) eran los que 'negociaban' los convenios sociales y laborales con la naviera de turno, y a esta, reitero, le convenía 'tenerlos contentos'. Servidor fue, como ya lo publiqué, Secretario General de la Sección Sindical del SLMM y portavoz del Comité Intercentros de Trasmediterránea (una flota de 3.000 tripulantes).
Las navieras del Estrecho se ponían de perfil ante el contrabando; no lo consideraban delito ni falta grave
Otra de las actividades 'sumergidas', de este área geográfica tan peculiar, consistía en la compra-venta compulsiva, su afición por 'mercadillos' que, en aquellos años, eran de una tremenda cutrez, no así las mercancías a la venta; provenientes de Ceuta y, en menor medida entonces, de Gibraltar.
También se practicaba el 'trueque'; de cuyas transacciones no quedaba constancia alguna, al tratarse de mercaderías de ilícito comercio, por falta de documentos de propiedad o por su dudosa procedencia.
El orígen de estas compra-ventas y trueques se remonta a la actividad de los 'mercheros' gaditanos
Los ferrys del Estrecho eran los vehículos utilizados por los militares (de muy diferente graduación) en sus desplazamientos a las 'antiguas plazas de soberanía', hoy ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, también para políticos de la UCD y del PSOE (a partir de 1982). Con varios pude establecer cierta relación, igual que con militares de rango elevado. Se trataba de militares en estado puro, posiblemente los mejor preparados de nuestro país. Jefes del Ejército de Tierra, de La Legión (la Lejía), y de los Tabores de Regulares. Militares muy preparados, muchos de ellos lo habían hecho en EEUU; no diré que 'demócratas', ni muchísimo menos, pero he de admitir que se trataba de profesionales de talante 'abierto', personas con empatía hacia la sociedad civil, y de educación esmerada.
Los Jefes viajaban en el puente de mando del ferry, con nosotros, y la relación era de distensión y empatía
Personalmente mantuve relación con Rodolfo Martín Villa, a quien conocí a bordo durante un viaje a Tánger (se decía que éramos 'clones' en lo físico). Nos invitó a su mesa de la sala de fiestas del Hotel Minzha (entonces de 5 estrellas y hoy rebajado a tres estrellas). Estuvimos hablando de la Transición hasta la madrugada; no me produjo la impresión de ser un fascista redomado, ni mucho menos. Ocupó el Ministerio del Interior en años muy complicados; creo que Martín Villa fue un pilar de la Transición política y un verdadero socio leal para Adolfo Suárez. Nos felicitamos las navidades varias veces, siempre muy amable conmigo.
Los Jefes de 'La Lejía' impresionaban, bien que favorablemente, y eran unos 'cachondos' casi todos ellos
(El próximo artículo hablaremos de la situación geopolítica en el Campo de Gibraltar, un nido de espías)
PS - En el recuerdo para siempre; en 1988 la Trasmediterránea, propiedad del Estado, dispuso sus dos mejores unidades: "Manuel Soto" y "J.J. Sister" como buques de crucero para hacer la ruta 'Aventura 92', un aula flotante para 400 alumnos a bordo del 'J.J. Sister' (El 'Manuel Soto', gemelo del anterior quedaría de reserva en la Península), en Centro América. En viaje de inspección falleció el presidente de Trasmediterránea. Su avioneta 'Piper' se estrelló y fallecieron los cinco ocupantes; con San Basilio (hermano de Paloma San Basilio) falleció su esposa. También falleció el super inspector Guillermo García Velasco, un hombre duro, con quien mantuve muy buena relación entre 1978 y 1985.
Nunca entendí como gente tan preparada embarcó en aquella "Piper" que ya había hecho un aterrizaje forzoso
