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| El garante del tocomocho genial fue Manolo Fraga Iribarne. (Foto 'eldiario.es') |
El conocido como el ‘Pacto de la Mugre’ se acordó de forma tácita a finales de la década de los “70” y principios de los “80”, frío ya del todo el cadáver del General Franco y atemperados los furores de su adictos; y se hizo con atrezzo adecuado a la importancia del mismo para el futuro de España. Para forzar el mismo y ‘desarmar’ a quienes pudieran oponerse al mismo se ‘inventó’ el golpe de estado de Tejero, que se llevó a efecto con conocimiento de las fuerzas firmantes del mismo. Lean 'La Saga de La Encomienda', háganme caso, por ahora es gratis.
Todos sabían aquél 23 de Febrero de 1981 que la asonada estaba bajo control
Los tres pilares fundamentales del 'Pacto de la Mugre' que cimentaron la Transición eran los siguientes:
Permitir que los socialistas del PSOE (y no otros) gobernaran España una ‘jartá’, o lo que es lo mismo, el tiempo suficiente para que la ciudadanía creyera que aquello de lo de la ‘libertad sin ira’ iba en serio y la dictadura de Franco había pasado a la historia. El personal no cayó en la cuenta de que nadie había rendido cuentas, a diferencia de lo ocurrido con los dirigentes del Nazismo y otros regímenes dictatoriales. Adolfo Suárez iba de 'blanco', de 'limpio' en argot gitano, como Pedro Sánchez, por eso se lo cargaron a la primera de cambio los 'felipistas', compinchados con la 'derecha' del régimen anterior.
Que mientras los socialistas del PSOE (y no otros) limpiaban la ‘mugre’ (léase sangre muy reciente, corrupción y nepotismo, represión absoluta y arbitrariedad continuada); los franquistas se reciclaban y convertían en una fuerza de centro derecha llamada a gobernar una vez que Europa revisara y aceptara sus nuevos ropajes ideológicos, lo que llevaba un tiempo; no se podía entrar de golpe en la OTAN y en la Comunidad Europea.
Se acercaba el momento del reparto: ¡Ojo! lo de ZP fue un imprevisto (11M)
Conseguido lo anterior: una población votando como loca a un falso ‘rojerío’; diríamos que casi ‘jartos’ de votar ‘en rojo’, se procedería al reparto de España. Para el PSOE las grandes reservas de la pobreza, todo el SW español, es decir: Andalucía, Castilla La Mancha y Extremadura; para la derecha, encuadrada toda ella, incluida la extrema derecha, el resto de España. Eran conscientes de que tenían que ceder, muy a su pesar, el País Vasco y Cataluña a los partidos nacionalistas (de derechas, por supuesto), pero eso ya lo arreglarían a base de pactos y trágalas y trampas.
Maniobra inteligente; no tuvieron presente que Transición significa 'sólo' eso Transición
Ávidos de poder, inmersos en la corrupción, tanto unos, los del PSOE, como otros, los del PP, quisieron convertir la Transición en algo perdurable, diríamos que eterno, y ahí se equivocaron; era de cajón: no puedes engañar a la misma gente durante el mismo tiempo, máxime si aumenta la ‘expectativa’ o 'esperanza' de vida y la gente se da cuenta, con el paso de esos nuevos años de vida, que la estafa ha sido monumental. Y es que siguen vivos (y ojalá lo sigan muchos años) Felipe González (multimillonario) y Nicolás Redondo (pensionista normalito) y claro, se produce, en terminología moderna, la implosión; lo extraño es que Felipe se atreva a aparecer en público, otro más listo que él no saldría de Marruecos, donde tiene una de sus mansiones a lo Brad Pitt y la Jolie. Como hizo su amigo, el socialista italiano BC, que se fue a vivir a Túnez, donde falleció en paz y sin insultos. (Y sin pasar por los Juzgados).
El resto lo conocen todos ustedes; Pedro Sánchez es limpio y va a morir matando
PS – Roto el pacto; que se preparen Susana Díaz, Fernández Vara y este elemento tan peculiar llamado Emiliano García Page; para los tres pintan bastos, igual que para nuestro Julián Nieva y su mentor el ‘chato’ Caballero. Nuestro agradecimiento a 'Podemos' y sus Confluencias, y al valiente Pedro Sánchez, que les ha jodido el invento (quiero decir que les tirará el templo, ya está agarrado a las columnas). Cualquiera entiende las razones de Susana, Vara y Page para exigir a Sánchez que apoyara la investidura de Rajoy; se trataría de asegurar la suya (de los tres) durante años. Lo de Chaves y Griñán no estaba en el guión, mucho menos que Pedro 'pasara' de ellos olímpicamente. ¿Alguien se imagina a Susana de Secretaria General del PSOE federal, o sea de toda España?
A España no la va a conocer ni la madre que la parió (Guerra), pero ahora de verdad
