Ágora
Nada Mariano, ¡hoy por tí, mañana por nosotros! (Foto de archivo) |
Ciñéndonos a esta localidad; dos fueron las proclamas-soflamas que más se escucharon en el parque de los patos (y de gatos asesinos de patitos) y en el Centro Social de la calle Empedrada, también en el reservado del ‘Flamingo’.
¡No a las mayorías absolutas! ¡No al bipartidismo! ¡Nunca más!
Todos los asistentes recordamos las arengas de Miguel Ramírez, y otros muchos, al respecto; todos aplaudiendo con las orejas, y casi todos creyéndoselo, algo lógico; una misma (sin llegar a aplaudir) confió en aquel movimiento; convencido que la corrupción era hija ilegítima de los dos grandes partidos en todos sus ámbitos: local, provincial, regional y nacional.
No se trata (sólo) de los ERES y de la GÜRTEL o de la PÚNICA, ¡quiá!
Se trata de una “piel de toro” putrefacta, pestilente, por una corrupción extendida por toda España; curiosamente, esta corrupción que ha hundido nuestro país, comenzó en los Ayuntamientos, y el responsable de esta génesis fue Felipe González, con su “Ley de Bases de Régimen Local”, que dotó de poderes plenipotenciarios a los alcaldes, alguno de los cuales ‘no sabían hacer la O con un canuto’.
A pesar de tan negros nubarrones, el bipartidismo no volverá