Criminólogo e Investigador
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| Nunca se debieron utilizar esas sillas altas; tampoco el salón (de la vergüenza e ignominia) |
Trascribo literalmente el último párrafo del artículo de hoy del amigo Carlos Elordi, en clara sintonía con lo que vengo manteniendo desde 2017 en "Azuer Diario" y en otros foros de Catalunya y Euskal Herría (el término 'Euskadi' y la 'Ikurriña' son propiedad privada del PNV, no de todos los vascos, tampoco de la nación vasca, que no es 'sabiniana', mayormente). Se pregunta Carlos Elordi: ¿A cuánta gente le indigna que unos relevantes cuadros políticos lleven más de dos años en prisión provisional, y no por corrupción, algo que sólo pasa en Turquía y en las dictaduras más brutales?
Los neofranquistas lo han conseguido: Catalunya y EH ya no son españolas 'de facto'
Los proyectos de vida de catalanes (de la terra y de la inmigración) no comparten modelo con el resto de españoles; se sienten orgullosos de la cultura (con mayúscula) que emana del Pirineo y de la ciudad de los prodigios, así como de la situación social y económica que permite que sus proyectos vitales se hagan realidad. Aunque los del ¡A por ellos! no se lo crean, los nietos de los 'españoles' que emigraron a Catalunya y a Euskal Herría, se sienten catalanes y vascos; hasta ahí lo normal, pero ¡ojo al dato! aparece una derivada con la que no se contaba, se sienten lejanos o alejados de España; lo certifican sociólogos del máximo nivel, aunque 'callan' para no echar gasolina al fuego que prendieron los franquistas 'empedrados' en la cúpula judicial española, ésta, efectivamente, es propia de una dictadura brutal, como mantiene Carlos Elordi (y servidor dos años antes que el buenazo de Carlos), en cualquier caso: ¡Bienvenido a bordo!
Mis críticos (abundantes) también son bienvenidos y algunos hasta 'perdonados' de corazón
