Dio comienzo a la huelga el mismo día 7 de enero, celebradas las fiestas navideñas, y la suspendió el día 20 del mismo mes, víspera de su cumpleaños. La huelga fue total y de la misma fue informado su médico de Manzanares, y oculta a sus hermanos médicos. La ingesta de agua azucarada y las pastillas 'mágicas' de prisiones lo mantuvieron en buenas condiciones hasta el octavo día. La decisión la tomó al enterarse en los Juzgados (en diciembre de 2014) de la interposición de dos querellas (números 7 y 8) por parte de la presidenta y ex presidenta del PP local, ambas querellas se convirtieron en humo en febrero de 2016. El equipo de gobierno del PP se lo tomó con absoluta indiferencia, incluido el fascista 'empedrado' en el propio equipo. Cuatro meses después, tan solo, les llegó el llanto y crujir de dientes; y abandonaron la política, eran conscientes de que el pueblo les había 'expulsado' para siempre. Lo estamos comprobando a lo largo de esta legislatura, ya periclitada. En el recuerdo de los vecinos; el episodio del alcalde saliente del PP negándose a entregar el bastón de mando al alcalde entrante del PSOE, a pesar de encontrarse, escoltado por su guardia de corps, en el salón del Gran Teatro, ante 1.500 vecinos. Es historia.
Perdió 4,5 kilos, que recuperó en abril, ver foto de ese mes, los del PP cayeron en mayo 2015
Hoy faltan por resolver tres causas penales de las ocho interpuestas por el PP y su entorno, así como por el entorno de las iglesia local. Se han disparado las visitas al blog ante las vigilias del 20 de diciembre, fecha del próximo juicio en el Penal 1 de los de Ciudad Real. En otro momento informaremos al detalle sobre aquella huelga, quienes fuerron los que ayudaron a MLFA (corriendo algún riesgo) y sobre la fiesta pantagruélica del 25 de mayo de 2015, con el equipo de gobierno despavorido y algunos de ellos solicitando pastillas, distintas de las 'antiespasmos' de la huelga de hambre. El abogado de las 'presidentas' querellantes resultó ser un perfecto caballero, de los que honran la profesión; que no son muchos, dicho sea de paso. Doy fe.