Luz de Gas
Magistrado
Los digitales que concitan mayores audiencias en Internet dependen de la publicidad en mayor medida – si cabe – que la prensa convencional (soporte papel) y engañan en lo referente a número de ‘socios’ o ‘amigos’, su otra fuente de financiación; es por ello que se han unido a los grandes manipuladores: diarios de ámbito nacional que no lee (prácticamente) nadie y emisoras de televisión que ve mucha gente. En el caso de los digitales hemos comprobado, algunos lectores nuestros también, que el salto ha resultado sideral; comenzaron con titulares ininteligibles, dizque provocadores, y sin sentido alguno y han terminado por publicar contenidos que tampoco se entienden (salvo excepciones), deslavazados casi todos ellos, contradictorios algunos y tendenciosos la gran mayoría de los publicados durante estos últimos meses. Se preparan para la vuelta del PSOE al poder, sin apreciar que “Pedro no baila solo” y tendrán que realizar una maniobra de reviro, tan alambicada que les puede arrastrar a la condición de zozobra económica.
Asistimos a un pandemónium digital parecido al de las ‘teles’
