Luz de Gas
Magistrado
Nuestro editor, aún acatando la sentencia, como no puede ser de otro modo, se niega a abonar la multa judicial y todo tipo de indemnizaciones y costas de los querellantes, del entorno de la iglesia católica de Ciudad Real, por considerarla 'injusta'. En román paladino: ni un solo euro saldrá de su bolsillo, la decisión es determinante y ha sido ‘razonada’ como ya conocen nuestros lectores. MLFA espera que su actitud sirva de ejemplo para todos aquellos que sufren persecución por una justicia que no es tal, doy fe de ello desde mi humilde despacho de juez del montón; ocupada en instruir causas contra delincuentes de todo pelaje, gente que merece estar privada de libertad. Yo me he negado a cualquier tipo de ascenso (que me correspondían por antigüedad) en la pirámide de la corrupción político-judicial; ascensos que llevaban incluida la negación de mi libertad como persona capaz de impartir justicia sin presiones de ningún tipo. También he luchado por los derechos de ‘mis’ delincuentes, por su reinserción en la sociedad, para ello estudié Criminología en la mejor universidad de Catalunya; aquellos conocimientos han resultado ser de gran ayuda para mi misión de ‘instruir’ causas penales.
La justicia española es franquista; jueces y fiscales, y policías de base: ¡Son comparsas!
Volviendo al ‘Caso Siembra’; se estudiará en seminarios jurídicos, todo saltará por los aires cuando prosperen las denuncias por prevaricación, imagino que, sustanciadas, con simples ‘pellizcos de monja’, nada de sanciones de una cierta relevancia. El coronavirus ‘Covid-19’ es la manta (cobertor) que tapará todo o lo reducirá a la mínima expresión. Igual que ocurrirá con muchos casos, la sociedad española no estaría por la labor de 'sancionar' al ‘borbón’, tampoco al jefe de los GAL (27 asesinatos 900 millones de pesetas), y mucho menos se preocupará por los graves ataques contra la libertad de expresión y por la lucha por una democracia de corte europeo.
MLFA se niega a pagar multas, indemnizaciones y costas judiciales de cualquiera de las partes
Los ‘famosos’ abogados penalistas decidieron no presentar minutas; pueden preguntarles las razones que les indujeron a ello; simplemente desaparecieron, conscientes de que corrían el gravísimo riesgo de aparecer vinculados a la presunta ‘conspiración’.
MLFA se ve afectado – como es de justicia – por su ‘Responsabilidad Personal Subsidiaria’ y lo asume con todas las consecuencias. Tres son las alternativas a aplicar por el juez de lo Penal, todas ellas dependen de su criterio jurídico: El 'Ingreso del penado en prisión'; los 'Trabajos en beneficio de la Comunidad'; y la 'Localización Permanente', lo que antes se conocía como ‘Arresto domiciliario’.
El lunes todo estará listo, como ya anunciamos; previo a la decisión del juez, vamos por delante
Ya han advertido a MLFA, a través de un ‘decreto’ del Letrado de la Administración Judicial, de que no obtendrá ‘beneficios penitenciarios’, algo que, obviamente, conocemos, aunque no lo sepa el Secretario, pero, como les dije el otro día, se sigue utilizando un lenguaje ‘intimidante’, que, en el caso de MLFA, resulta exacerbado de todo punto. Tenemos la impresión de que los ‘intimidados’ son los querellantes-sicarios que tienen que hacer frente a las minutas de sus abogados y, en el plano vital-social, nada desdeñable, como es obvio: han sido ‘apartados’ de la revista en la que trabajaban desde hace muchos años y tienen que hacer frente al oprobio social en comunidades pequeñas; qué decir de los párrocos, apartados por jubilaciones o traslados, y uno de ellos con la espada de Damocles de presuntos expolios sobre su ‘tonsura’, y vergüenza generalizada entre la ‘beatería’, cuyo líder (el hombre de la Iglesia en 'Siembra') ha terminado ‘repartiendo’ billetes de 50 € entre los pobres de ‘Cáritas’ y haciendo la vista gorda sobre el ‘destino’ de esos euros. (Su prestigio profesional por los suelos, como la mayoría de sus obras colapsadas: Castillo, Plaza Mayor y Ermita NPJP, milagrosamente sin víctimas).
En el peor de los supuestos estamos hablando de ‘165 días’ y en todos de dignidad