MLFA
La derecha española, alineada con Turquía, Hungría, Polonia y con el payaso Trump, rechaza el resultado electoral que mostraron las urnas el pasado "23J", y lo más grave es que cuenta con el respaldo de la cúpula judicial, dispuesta a dinamitar la acción de gobierno a lo largo de los próximos meses. Nada nuevo bajo el sol; desde la muerte del dictador, tanto "AP" como "PP" cabalgan por la frontera del golpismo y son desestimados en Europa. Aznar y M. Rajoy no fueron tenidos en cuenta en la UE, de hecho se desconoce que presentaran iniciativa alguna, y los archivos fotográficos muestran a estos dos presidentes entre rincones y, a veces, semiocultos entre cortinones, tanto en Bruselas como en Estrasburgo. Ha sido allí, precisamente, en Bruselas, donde Puigdemont ha decidido quién gobernará España durante los próximos cuatro años. Se impone una reconversión del PP que pasará por depilar su pelo de la dehesa franquista de forma definita y permanente.
Hablo de varios meses, quizás a lo largo de 2024; es el tiempo que tardará la UE en tomar cartas en el asunto; también intervendrá el PPE (Partido Popular Europeo), a pesar de que no conocen al tal Feijoó
Ha llegado la hora de Juanma Moreno; lo primero que hará es confinar al Benbobo, contaminado por Feijoó, y recuperar sus amistades madrileñas, que no son muchas, de las cuales excluirá a la marquesa, una tipeja del todo amortizada. No se dejará ver por Madrid, ciudad que (más que nunca) huele a calamares; y al sobaco de la Ayuso, que se lo frotaba ayer con fruición en la manifestación. (Es sabido que los Austria no se bañaban a menudo y ella aspira a ser como ellos).
Juanma Moreno dispondría, sólo en Andalucía, de 4/5 millones de votos de los 12,5 millones que necesitaría
(La Ayuso obtendría esos mismos 4/5 millones de votos en Madrid, el nuevo México DF, y "0" votos en España)