MLFA
Obra pictórica de Lucarini que fue expuesta junto con su busto de mármol en el Guggenheim de Bilbao |
En el corazón mi padre siempre; hoy junto a los prisioneros catalanes
El doctor Luño nació en Rentería en 1912 y falleció en Bilbao el 5 de Enero de 1992; casado con Elisa Fernández-Armesto, licenciada en Filosofía y Letras, y padre de siete hijos, uno de los cuales, Jesús, empresario de hostelería, falleció en Bilbao (2007) a la edad de 52 años; dos de ellos, José y Elisa son médicos de reconocido prestigio y comparten profesión con uno de los yernos y una nuera: Santiago y Marisol; Isabel y María son empresarias; Lucía es farmacéutica. Todos ellos están repartidos por la geografía española: Bilbao, Madrid y Oviedo. Josetxo, ex director del hospital ‘Gregorio Marañón’, realiza trasplantes de riñón en todo el mundo: desde Cuba hasta EEUU y Canadá, amen de varios países de Asia, incluido Haití; donde organizó diálisis de urgencia a bordo de buques hospital de la flota USA, con ocasión del terrible terremoto que sufrió la isla caribeña, sus publicaciones científicas se estudian en toda Europa y América. Elisa es vocal de la Real Academia de Medicina del Principado de Asturias. Mi madre nos dejó en 1994, marchó presurosa a reunirse con él allá arriba.
Capitán médico del Ejército de la República fue hecho prisionero en la bolsa de Laredo-Santoña, junto con un elevado número de sanitarios republicanos y dirigentes del PNV (Partido Nacionalista Vasco), zona donde esperaban ser embarcados en buques del Gobierno italiano, tal y como se había pactado con el general Franco. Éste no permitió que los buques italianos fondearan en la playa de Laredo y encerró a todos en el penal del Dueso (Santoña), que le pillaba cerca. Mi padre nunca portó arma alguna a pesar de los numerosos requerimientos para que portara su pistola reglamentaria.
Condenado a muerte durante 23 meses tuvo que sufrir la ‘saca’ de muchos de sus compañeros cada amanecer para ser fusilados en la tapia trasera del propio penal. Transcurrido ese período (todo se publicó en “23 meses condenado a muerte”) la pena fue conmutada por la de 30 años de reclusión, de los que llegó a cumplir 6, allí en el Dueso.
En 1959, como ya se escribió en este blog intimista hace un tiempo, fue recluido en la prisión de Larrínaga (Bilbao) por orden gubernativa; el gobernador de Vizcaya era Genaro Riestra, el motivo aducido: haber extraído una bala del cuerpo de un ‘maquis’ (que llegó a mi casa) herido de muerte por la Guardia Civil en la consulta que mi padre tenía en el domicilio familiar, donde realizaba medicina social de la mano del párroco de la Quinta Parroquia bilbaína (el recordado por todos don Vicente), sus pacientes: prostitutas, inmigrantes de otras provincias de España, gitanos que ejercían de chatarreros en Bilbao; el maquis debía tener noticias sobre las tareas del médico republicano y el párroco nacional-católico. De nada sirvió que un abogado alegara que mi padre había rechazado de manera firme y con vehemencia las 25.000 pesetas (de 1959) que le entregaron aquellos maquis, metidas en una caja de puros ‘Romeo y Julieta’, una verdadera fortuna para un médico que ya tenía cinco hijos. Fuimos repartidos por El Ferrol, Pamplona y San Sebastián para que mi madre se ocupara del marido encarcelado. Ironías de la vida; los dos mayores fuimos a vivir con los abuelos maternos al edificio donde nació Francisco Franco Bahamonde, allí teníamos a la vista (junto al portal) la placa recordando a su hermano fallecido en accidente de aviación.
Los dos mayores con los abuelos en el piso de abajo de los Franco en la Plaza de España de Ferrol
Mi padre fue liberado un año después ya que no se presentaron cargos. Como ya se dijo, con ocasión del encarcelamiento de políticos catalanes, la mayoría de funcionarios de la prisión de Larrínaga, que fueron atendidos de sus dolencias en la enfermería de la cárcel (donde dormía mi padre), se hicieron pacientes suyos por el sistema de iguala médica (60 pesetas al trimestre) hasta el fin de sus días; sin olvidar los regalos que nos hacían (todos los años) a los chavales en esta noche de Reyes.
Que los presos catalanes sean liberados ya, y recuerden la cárcel con orgullo
Oriol Junqueras, Joaquim Forn, Jordi Cuixart y Jordi Sánchez ¡Honor! |
PS – Es lo que mi padre les habría pedido: orgullo y honor al ser presos de conciencia en opinión de muchos políticos, juristas y académicos. Prisión que tendrá consecuencias, como nos advierte ya la propia Unión Europa (claro que en la intimidad). Como corresponde a esta reseña-recordatorio he utilizado un lenguaje intimista, de mesa camilla, del que he extraído cualquier atisbo de rencor. Hemos ajustado cuentas donde correspondía, bien lo saben algunos; nos queda el recuerdo de unos padres entregados a los propios hijos y al prójimo durante toda su vida. No obstante seguimos en vigilia al constatar que renace en España un nuevo 'franquismo' sin Franco y lo hace con fuerza. Tampoco queda la esperanza blanca socialista al ser sus dirigentes 'colaboradores necesarios' en la gravísima corrupción que atenaza el futuro de nuestro país. Los catalanes han sido los primeros en darse cuenta de que no les sirve 'esta' España. Me dice junto al oído una de estas juristas que el franquismo no renace al no haber muerto, ¡oído cocina! ¡Medina Azahara patrimonio de la humanidad! ¡Llibertat presos polítics! Los brindis por los presos y el borde de las copas con lágrimas se extienden por toda Catalunya y una parte de España, la más cultivada y noble. ¡Don Martín vive!