MLFA
Meteorólogo
Varios lectores nos preguntan por el significado de la 'Inversión térmica', algunos confunden el término con el 'cambio del tiempo' producido por el calentamiento global; algo que está provocando cierto histerismo entre la población española; no tanto en la europea, mucho mejor informada. Cuestiones como cambiar de coche; no solo eso, que ya es preocupante para muchas familias y autónomos: ¡Tira la furgo Manué! sino entrever la posibilidad de que el coche recién comprado (a la fuerza) no valga dentro de cuatro años; y esperen ustedes a que aparezca en su casa un inspector del ministro comunista para decirles que tienen que cambiar de electrodomésticos, AA y calefacciones, por otros de menores emisiones de CO2 y, ya de paso, les conmine a no tirarse pedos, (gas metano), aprendiendo a 'estrangularlos', que todo esto y mucho más está al llegar. Garzón no les dirá nada a sus compañeras del consejo de ministras acerca de las emisiones tóxicas de la enorme flota de 'audis' que va a necesitar este macro consejo de ministras. Les contaré una anécdota, va en serio; la mayoría de guardias civiles (juro por Dios que no es una broma) que prestaban servicio de escolta a políticos vascos amenazados por ETA llevaban la comida de casa, o del cuartel, en una fiambrera, o bien, bocadillos envueltos en papel de aluminio, que degustaban en los coches (sin distintivos), mientras los 'amenazados' se sentaban a comer (a la carta) en los mejores restaurantes de Euskadi. Los guardias lo hacían por ahorrar, algo que dice mucho en su favor. Uno se pregunta ahora: los guardias que continúen degustando el 'bocata mortadela' en la puerta de los marqueses-ministras de Galapagar, deberán 'estrangular' sus ventosidades, teniendo en cuenta la flatulencia que producen el choped y la mortadela. Convendría aclararlo para general información. ¡Son muchos bocadillos al mes, yar! Que no se me olvide: si el perro se tira pedos en el coche, aburrido ya del viaje y por la mala calidad del pienso, ¡por favor! ¡cierren las ventanillas!
La 'inversión térmica' no tiene nada que ver con el calentamiento global ni con los pedos
La insolación producida por los rayos solares calienta la tierra y el aire que la rodea (capas bajas de la atmósfera). Este aire más caliente tiene menor 'densidad', o lo que es lo mismo, menos 'peso'; al pesar menos va ascendiendo en altura.
A medida que esa masa de aire asciende a capas superiores de la atmósfera se enfría y vuelve a recuperar su densidad inicial de superficie y capas bajas y, por lo tanto, recuperará su peso; les recuerdo: densidad del aire = peso del aire.
Este fenómeno se conoce con el nombre de 'convección', una de las tres formas de transmisión del calor. A nosotros nos interesa la 'convección', por medio de la cual se produce un intercambio de calor entre masas sometidas a diferentes temperaturas.
La 'inversión térmica' se produce cuando las masas de aire 'pegadas' a la tierra se mantienen más 'frías' que las masas de aire que están en altura; o sea, al revés de lo normal.
Los montañeros y esquiadores pasan calor y los del pueblo de abajo pasan frío.
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| "Efecto Invernadero" |
Este fenómeno se produce en situaciones anticiclónicas y cielos despejados, largas noches de invierno, nieblas de superficie, y ausencia de viento; causas todas ellas que hacen que la superficie de la tierra 'se enfríe' rápidamente. Esta capa de aire del suelo está más fría - insisto en ello - que la capa de aire en altura - tienen diferentes densidades y, por tanto, no se mezclan.
Conforme avanza el día el sol 'corrige' la inversión térmica a medida que vuelve a calentar la superficie de la tierra. En España la inversión térmica se produce en los meses de diciembre y enero siempre que nos encontremos en situación anticiclónica.
PS - Los gobiernos que se excedan en el control del 'calentamiento global' irán perdiendo las elecciones - una tras otra - ya que el rollo del diesel, el coche eléctrico, y los pedos, deben 'actualizarse' en su justa medida. Provocar miedos innecesarios en la población 'alienta' posiciones políticas extremas. Y, seamos sinceros, estamos dando pasos (hace varios años) en el buen camino; es obvio. Nos preocupan las imbecilidades de un ministro comunista de Consumo, capaz de convertirnos en 'veganos', que pierda toda esperanza y disfrute del sillón que - hace semanas - decía que no quería; será cabrón el tío.
