viernes, 6 de octubre de 2017

Los catalanes no necesitan pistolas para quebrar Transición del ‘78’

MLFA
ad darr

Es un hecho incuestionable, admitido por las mentes más lúcidas y ecuánimes de nuestro país, que las ventajas obtenidas por mis paisanos (que no votaron la CE) del régimen del ‘78’ y que están reflejadas en la propia Constitución y en el Estatuto de Guernica, no hubieran existido sin las ‘pistolas’ – eso sí, virtuales – que llevaban ajustadas a la cinturilla del pantalón de pinzas los representantes del PNV en sus viajes diarios a Madrid (a golpe de coche cama de la ‘wagons lits’ de Franco). No hay más que recordar al ‘deslenguado’ Arzallus: “Unos mueven el árbol (los de ETA) y otros (los del PNV) recogemos las nueces”.

Se falseó la historia, ofreciendo una versión-visión del régimen foral que no se correspondía con la realidad; de forma que se justificara la recuperación del Concierto. Es muy fácil de rebatir; no obstante sería inane del todo, por ello no lo intentamos. Quedamos así: sin la banda asesinando a destajo, los juristas españoles hubieran demostrado a la sociedad vasca y a la española (también) que el Título VIII de la CE, que habla del Estado de las Autonomías, sustituía de ‘iure’ al carpetovetónico régimen foral. Dicho en ‘ladino’: Los Fueros tenían razón de existir ‘contra’ el estado centralista y jacobino; en ningún caso una vez producida la gran descentralización que supuso el tan citado Título VIII y la nueva transferencia de competencias a las regiones, superior a la que disfrutan los ‘länder’ alemanes.

Imaginemos que alguien quiere recuperar el ‘derecho de pernada’ con el argumento de que ‘existió’ legalmente

El régimen del ‘78’, conocido como la Transición Española, ha colapsado este año del Señor de 2017, cuatro décadas después de su instauración a través de la Ley de 'Reforma' Política, y los artífices de la demolición han sido los catalanes; utilizando claveles en vez de pistolas de 9mm parabellum, tal y como ocurrió en Portugal (salvando las diferencias entre la dictadura de Salazar y el totalitarismo del PP). Se conoce un atentado puntual, el realizado contra la GC y sus vehículos ante las puertas de la Consellería de Economía de la Generalitat, y está en manos de los tribunales; ataque que criticamos con firmeza (en su día) desde nuestro blog.

El grave enfrentamiento entre 'policías' es un indicador (otro más) de que la ruptura está en puertas.
Ruptura que deberá ser enriquecedora social y económicamente; con mayor libertad

A partir de ahora hablaremos de una segunda Transición, esta vez de ‘ruptura’, mal que les pese (como dicen en mi pueblo) a los herederos del ‘franquismo’ (PP y PSOE) y a sus nuevos compañeros de ‘coche cama’, los ‘unionistas’ de ‘Ciudadanos’ y sus bellezones-xerraires. El jefe selecciona el personal de dirección, como su antagonista Pablo.

Para que el futuro venga preñado de éxito se hará necesario recordar el pasado, como hemos hecho aquí