"La inteligencia es la capacidad de uno mismo para adaptarse a los cambios". Martin L Fernández-Armesto (1948 - 1970 - 1986 - 2004 - 2015 - 2023) "Azuer Diario ex Azuer Digital" desde 2013. "No hay soledad donde hay saber, conocimientos e información veraz". "Aguantar es vencer". (MLFA)
lunes, 11 de marzo de 2019
Seguro que Jesús agradece "no estar presente" en la Sala Penal TS
La ex Fiscal General del Estado se enroca con testigos y "naufraga"
El fiscal Zaragoza pertenece a la "Unión de Fiscales Progresistas"
La Saga de La Encomienda por Martín L Fernández-Armesto (073)
Palacio de Ajuria Enea, residencia oficial del Lehendakari desde 1980 |
Y consiguen que se les transfiera, a las restantes catorce Comunidades, competencias muy importantes, entre ellas las de Sanidad y Educación, que eran exclusivas del Estado. Llegará un momento, entre 1986 y 1992, que, a excepción de las Prisiones en Catalunya, la Policía en Euskadi y Catalunya, y la Hacienda en Euskadi, todas las Comunidades Autónomas tendrán las mismas competencias o su gestión delegada; ello provoca el malestar de dos de las tres comunidades históricas, Catalunya y Euskadi, que inician un salto cualitativo y empiezan a hablar, ya sin tapujos, de independencia. La delegación pasó a ser de facto una real entrega de competencias a manos de políticos regionales ávidos de poder, dispuestos a legislar, como posesos, acerca del sexo de los ángeles o sobre el crecimiento del tallo de cebada.
domingo, 10 de marzo de 2019
Canal Sur TV: Hoy se pone fin a un mes de Carnavales en Andalucía
La Saga de La Encomienda por Martín L Fernández-Armesto (072)
Ayuntamiento de Torrejón del Rey |
La herramienta que utilizaron los catalanes, nada que ver con las armas de fuego, fue la lengua catalana; ahí sí, ahí hay que quitarse la boina, mejor dicho la barretina; contra la madre que se dirige a su hijo recién nacido en su lengua propia, el catalán, no se puede luchar, y el que lo intente es un imprudente, también un desaprensivo, y esa batalla está perdida de antemano, no lo supieron entender los padres de la Constitución y castigaron a una ‘nación’ española con un Estatuto de Autonomía cicatero, lleno de condicionantes y muy inferior al vasco, en cuanto al techo competencial se refiere. Los catalanes se dispusieron, ya desde el primer momento, a reivindicar sus peculiaridades de forma pacífica, haciendo mucho hincapié en la Educación, como resultaba obvio, el tiempo y su lucha les vino a dar la razón. Al igual que los trajes o vestidos femeninos, la Constitución se cosió con hilvanes, la diferencia entre aquellos políticos y los sastres o sastras, que así se decían si eran mujeres, radicaba en que éstos y éstas terminaban el cosido y sus remates antes de entregar la prenda al cliente; nuestra Constitución se presentó solo con los hilvanes y su vista previa resultó aceptable, pero no se cosió ni se remató, y los hilvanes, es bien sabido, terminan soltándose del todo y dejándote la hombrera sobre el escote palabra de honor.