MLFA - Experto Docente en Seguridad Integral y LCI por el ISM
Modelo de coche de un trabajador en España; por ejemplo, de un obrero portuario o de un albañil currando 'en negro'.
Estoy que no me llega el aire al cuello, de hecho llevo varias noches despertándome a las 03:00 horas de la madrugada; resulta que, después de más de un millón de kilómetros conduciendo coches y motocicletas, llevando barcos ya ni te cuento; me entero de que un coche a 20 y/o 30 kilómetros, es decir 'metida la segunda' contamina menos que a 60 kilómetros 'metida la tercera'. Y se disparará el nivel de decibelios en pueblos y ciudades. ¿Por qué promulgan leyes absurdas e ineficaces? Porque les sale de los cojones, como los peatones de los que hablaremos en el siguiente párrafo. A ver si suben el SMI antes de irse a casa en 2023.
Hete aquí que nuestro presidente, un tipo listo (me han dicho que es doctor en no se qué), ha decidido, de consuno con el iluminado director general de Tráfico, que vayamos todo el rato 'en segunda', escupiendo gases por un tubo (claro, el de escape), gripando motores y reventando correas de distribución; eso sin tener en cuenta el enorme nerviosismo, por no llamarlo 'encabronamiento', de los conductores al tener que fijar la vista en el velocímetro, con el consiguiente riesgo de 'atropellar' al tío (el peatón/peatona) que cruza por donde le sale de los cojones y atraviesa los semáforos 'en rojo'. No hacen falta los GPS-Audio; a 20 por hora puedes leer los nombres de plazas, calles y establecimientos, y hasta metiendo mano a la acompañante en condiciones más seguras que a 180; resulta obvio.
Esta motocicleta, metida la segunda, puede contaminar un barrio entero de una pasada. Se han vuelto locos.
Ayuso: ¡Sálvanos de estos liberticidas! ¡Por Dios! dicen los madrileños y resto de españoles
