domingo, 2 de mayo de 2021

La expresión "tercera dosis" de la vacuna de Pfizer no es la correcta

MLFA – Técnico Sanitario Grado Avanzado (STCW-C 164 ILO)


De todas las vacunas que me han inoculado desde 1969, que son todas las existentes contra enfermedades infecto-contagiosas, incluida la del ‘Ébola’ en Dubrovnik (antigua Yugoslavia) en diciembre de 2003, sin olvidar los últimos 15 años, vacunado contra la gripe (2006-2021), y contra la neumonía (2016-2018). Hago abstracción de las vacunas infantiles: sarampión, varicela, difteria, triple vírica y otras que no recuerdo. Las correspondientes a 21 años de profesión como navegante por África, Asia y Oceanía fueron: Fiebre Amarilla, Viruela, Dengue, Cólera Morbo, Difteria y Ébola ya citado, Virus del Nilo; y medicación antimalaria. En estos días he sido vacunado contra la ‘Covid-19’. De todas ellas, digo, guardo un recuerdo imborrable, protegieron mi salud en condiciones sanitarias adversas, diría que calamitosas. Egipto, Vietnam, Cambodia, Golfo Pérsico, Indonesia y todo el continente africano: prácticamente todos los países desde Marruecos hasta Etiopía.

Me centraré en la ‘Fiebre Amarilla’ desde esta humilde cátedra de Vacunología

El cuerpo humano es un almacén perfectamente organizado (al estilo ‘Amazon’) en el cual se guardan nuestras ‘defensas’ inmunológicas, por lo cual podríamos hablar de un ‘arsenal’. Esas defensas, en general el conjunto de las mismas, son de mayor o menor calidad en función de cómo ‘cuidamos’ nuestro organismo en lo relativo a la alimentación y cuidados del mismo; sin ignorar factores de tipo ‘genético’, de suma importancia.

La recuperación de un enfermo depende de la calidad de sus ‘defensas’ o ‘soldados’

Mosquito "Aedes Aegypti", transmisor de la mortífera "Fiebre Amarilla".

Resulta obvio de toda obviedad que los medios de comunicación, especialmente las cadenas privadas de TV (de todo el espectro ideológico existente), han provocado un daño irreparable en nuestra ciudadanía; daños mentales de los que muchos tardarán años en recuperarse. La manipulación informativa ha sido de magnitud sideral. Editores, realizadores y técnicos, presentadores, tertulianos y falsos ‘expertos’ solo merecen nuestro desprecio más absoluto. A salvo excepciones; como siempre: ‘TV3’ y ‘EITB’. 'RTVE' no ha estado a la altura de tan trágicas circunstancias, por su afán de ‘competir’ con las emisoras de radio y televisión privadas. La hermosa meteoróloga reciclada en presentadora de tertulia matutina debería trabajar en 'Antena 3'. Hemos cambiado una buena meteoróloga por una insolvente a nivel político y social. Cuestión de 'ego' y buenas relaciones. Por cierto; resulta bastante impertinente.

Les llegará su hora; ellos mismos han resultado ‘quemados’ en el altar o pira funeraria de la mente colectiva. Hoy; la juventud no ‘mira’ la televisión, tampoco la ‘miran’ los ciudadanos medianamente cultivados. Hoy; la ‘tele’ es para la clase media baja y para seis millones de ‘jubilatas’ que dedican una media de 6/8 horas diarias a ‘mirar’ la tele; gracias a ese ‘enganche’ conseguirán finalizar su existencia absolutamente ‘embrutecidos’, indigno final del ‘regalo’ que el Señor les concedió al traerlos al mundo. Encima, el coronavirus les ha relegado al desván, allí les han instalado una tele vieja colocada encima de una silla desvencijada.

Y no valen excusas: ¡El bruto lo es por su propia voluntad! ¡El palurdo disfruta!

Los anticuerpos son los 'soldados' que defienden nuestro organismo de las enfermedades infecto-contagiosas.

Pero volvamos al titular; en mi caso, tras 16 años vacunándome contra la gripe y dos contra la neumonía, no digo: ¡He recibido la dosis dieciséis de la vacuna de la gripe! ¡He recibido la segunda dosis de la neumonía!

Simplemente digo: ¡Todos los años me vacuno contra la gripe y a veces contra la neumonía!

Cuando la vacuna de Pfizer contra el ‘SARS-CoV-2’ adquirió el certificado de ‘vacuna de lujo’ las otras farmacéuticas, algunas bajo sospecha por efectos secundarios (trombosis), se pusieron a la defensiva y, como no hay mejor defensa que un buen ataque, utilizan los medios de comunicación (a estos no les importa quien pague) para ‘desmotivar’ a los fans de Pfizer.

El españolito de ‘La Sexta’ y concordantes dice: ¡Joder, otra dosis más, vaya mierda!

La "Gripe Española" 18 millones de víctimas a principios del siglo XX.

Los de Pfizer lo que han dicho es algo lógico para quienes venimos siendo vacunados desde que nacimos: ¡Hay que vacunarse todos los años! Vuelvo al principio; la vacuna contra la ‘Fiebre Amarilla’ la recibíamos cada seis meses, en cualquier lugar del mundo donde nos encontráramos, y no contábamos ‘dosis’ sino ‘vacunas’. Pfizer anuncia lo obvio: que habrá que vacunarse cada año hasta que la ‘OMS’ decrete la erradicación de la pandemis provocada por este virus en concreto; como lo hizo ‘SARS’ entre 2003 y 2005 en Asia y 'MER' entre 2012 y 2014 en Arabia.

La expresión: ¡Pfizer advierte de la necesidad de una tercera dosis! ¡Manipulación!

PS – A todo esto; los medios de comunicación se están ‘forrando’ (literalmente), y en cada ‘jubilata’, ‘peluquera’, o ‘paleto’ al uso, encontramos un sesudo epidemiólogo, que sienta cátedra mientras descansa apoyado en carro y escobón, con la batería del móvil agotada y la mascareta anudada en la sotabarba. Forman parte del yacimiento de votos de los de ‘VOX’. Estos alcanzarán el 20% de los votos en España y ahí se estancarán, no es poca cosa.

Los ‘anticuerpos’, ‘defensas’ o ‘soldados’ no son eternos; de ahí la vacuna anual


Respecto de la vacuna del virus de la gripe; cada año varía su composición, se debe a que dicho virus experimenta mutaciones. ¿Tan difícil es explicar esto por la TV en plan pedagógico? No es cuestión de dificultad; los comunicadores buscan falsos debates, escándalos, en definitiva: generar incertidumbre y preocupación en la ciudadanía, de forma que sigan ‘pegados’ al televisor (cagaítos), en compañía diaria de Arguiñano que les convencerá de las bondades de incluir petróleo en el caldo sopero para darle más 'gusto' al producto.