MLFA - Residente en Catalunya entre 1986 y 2004. En Euskadi durante 34 años, en Castilla 13 años, otros 3 en Madrid, y 8 en Andalucía. Derecho a opinar.
Oriol Junqueras no da la talla de Mefistófeles, pero tiene algo de él, me refiero a la dualidad que caracteriza a ambos; que se arman un lío con el bien y el mal, algo que los psicólogos de hoy en día definen como bipolaridad, (cambios bruscos en el carácter); un trastorno muy común en los políticos españoles, y que podría definirse, incluso, como psicopatía política, o como sociopatía política. De ahí proviene la desconfianza secular hacia la clase política; España, como Portugal, y como Italia, está destinada a ser dirigida por gobiernos fuertes, de tinte conservador; los españoles están acostumbrados a obedecer, y, en el mejor de los casos, podrían reconducir su estatus dentro de 40 o 50 años, fallecidos los mayores de 45/50 años. El español actual sigue lastrado por costumbres perversas a las que se acomoda; responsables: la Iglesia Católica, la sangrienta dictadura de Franco, y la grave corrupción consuetudinaria; estraperlo, contrabando, matuteo, 'narco', mercado negro, trueque, comisiones, malversación de caudales públicos, amiguismo, nepotismo, y, sobre todo, ausencia de sentido de pertenencia, y un manto de ignorancia que le impide progresar. Sin ignorar que la envidia es 'marca España' desde hace siglos, tan pertinaz como las sequías durante el franquismo. ¿A qué viene este suplido? Pues a que 'tontorrones' como Junqueras, e incapaces como Aragonés, entre otros catalanes, se consideran superiores al resto de españoles, y no son conscientes de que son sus iguales, beneficiados, eso sí, de un sistema económico superior, promovido por su tejido industrial, que les hace parecer más europeos y menos españoles; todo ello es una puta ficción. Y no me hagan hablar de la pretendida superioridad de los vascos, ahí es que me meo de la risa. Son sus sistemas, no sus hombres y mujeres, los que los diferencian de una España cateta y pacata, temerosa y poco o nada reivindicativa. En Castilla la Vieja se dice: ¡Dios proveerá! y en la Nueva, los manchegos dicen ¡Convendrá! Francia dispone de 'La Francia Insumisa', nosotros somos 'La España sumisa!
El Junqueras 'bonachón' es una falsa imagen de un 'diablo' apegado a sus intereses personales, y sin empatía
Junqueras ha manipulado a Puigdemont (aunque este lo caló enseguida y lo apartó); y lo ha hecho con el petit Aragonés, con el charnego Rufián, y con las bobitas de su formación política; lo intentó con Marta Rovira, pero esta, al igual que Puigdemont, se dio cuenta enseguida, sobre todo desde la perspectiva que da el exilio en Suiza, país donde 'Gordo Junqueras' regentaría un puesto callejero de venta de salchichas.
A raíz del ostión de ERC en las catalanas, solo quedaba Marta Rovira para seguir "engañando" a los militantes
(Ella ha aceptado la misión, pero advirtiendo que, en cuanto termine la 'seva feina', dejará la formación ERC)
ERC no es 'independentista' es 'socialista-catalanista' y ondea, en falso, la bandera 'republicana', que no cuela
(Tampoco 'cuela' lo del "Referéndum", ni lo del "Concierto Económico" y lo del "Cupo" como vascos y navarros)
(Y en cuanto a los trenes de cercanías, el pérfido Sánchez solo les transferirá la 'Selección de los maquinistas')
Lo de que las 'bases' decidirán solo se lo creen los imbéciles, las bases no son 'nadie' en España