MLFA
Nunca he utilizado la expresión ¡Negro! en tono despectivo; pero en el caso de este muchacho el mínimo aplicables sería: ¡Extravagante! o ¡Capullo! Cuando creíamos que las "rastas" habían desaparecido con el diputado hortera de Podemos, aparece el de KutxaBank. ¿Lo imaginan tomando vinos con Aitor Esteban?
Menos mal que no vive en EEUU y que no viaja en metro; en determinadas y delicadas circunstancias, como las que vive hoy en día el mundo occidental, en especial España, se debe ser prudente y nada ostentoso; me imagino a este joven, disfrazado de 'mico', a los mandos de su portentoso buga, (100.000 €), entrando en el parking de su club (a veces quemando rueda). Los acogemos, de mejor o peor gana (más bien 'peor'), nos hacemos cargo de su futuro, los dotamos de móvil inteligente (me refiero al móvil) y, conscientes de que la gran mayoría de ellos no quieren 'formarse', mucho menos 'estudiar', acudimos a determinadas instituciones, más o menos 'ilusas', para que se hagan cargo de buscar una solución vital a futuro; poniendo a su disposición todo tipo de ayudas: para padres, madres, hijos, y resto de parientes; a veces aparece un cura voluntarioso (de los que no se mueven en la pederastia, claro), este ve las posibilidades del chaval con el balón, y lo lleva al campo de fútbol a los 4 añitos; si el cura acierta, enseña al niño africano a leer y escribir en castellano o en catalán, (del Magreb o del Sahel, tanto monta) y a esperar a un 'ojeador' de Can Barça o del Bernabeu.
Fracaso escolar: ¿A quién le importa, si es millonario a los 17 años? Todo son facilidades; no para el de aquí
(Pregunta del año: ¿Colaboran y ayudan a los chavales de su aldea que malviven en la miseria más brutal?)
Vamos a verlo desde otro prisma: Érase una vez en la Misericordia de Bilbao, la Beneficencia, para entendernos; Vicentico era huérfano y estaba acogido en esa gran institución bilbaína (Junto al Sagrado Corazón). El chaval aquel (tengo su cara y su humilde pero digno ropaje (llevaba una estrecha corbatilla) en mi deteriorada retina, hiciera frio o calor, o lloviera (entonces en Bilbao llovía 200 días al año); se levantaba de madrugada, iba con su viejo carretón de mano, a la distribuidora de Pozas, volvía a la plaza del Sagrado Corazón y vendía los periódicos a los conductores de los coches, que se veían obligados a aminorar su velocidad en la curva de circunvalación hacia Deusto, yo la utilizaba para ir a la Universidad de Deusto, primero, y más tarde a la Facultad de Náutica. El chaval fue creciendo, yo lo perdí de vista cuando embarqué para África; me dijeron que aprendió el oficio en rotativas, prensas y tipografía, y, años más tarde llegó a ser director del diario de la tarde "Hierro" de Bilbao.
Vicentico fue el paradigma del esfuerzo personal y de la dignidad, no llegó a ser millonario, como estos tíos
(Los mismos españoles que desprecian a 'moros' y a 'negros'..., se han vuelto 'majaras' con ¡estos negros!)
El Athletic ha pasado de jugar "sólo" con vascos a contratar 'mamarrachos': ¡PNV!
¿Quién es el responsable de que se insulte a estos muchachos? ¡KutxaBank! ¡Digo!
(Prepárense para cuando finalice esta Eurocopa y la gente comience a 'serenarse')
¿Qué haremos cuando los energúmenos vuelvan a llamar "monos" a estos jóvenes?
Y en Bilbao, hasta sus padres llamarían al de la foto: ¡Aparvado! En Francia: ¡Con!
¡El seleccionador nombrado por Rubiales ha dado orden de no 'mentar' a las chicas!
(El 'bilbainismo' ha vuelto a certificar que no representa el 'sentir' de Euskal Herria)