Carlos Elordi
Concentraciones masivas a las puertas de la Audiencia provincial de Pamplona. |
¿Sólo queda el derecho al pataleo? ¿Sólo cabe la indignación sin consecuencias políticas tras un nuevo atentado brutal contra los derechos más elementales? ¿Por qué los jueces no dicen nada ante el horror que hay en la sentencia de Pamplona, salvo excepciones como la de Baltasar Garzón, que confirman la regla de la hipocresía interesada y del corporativismo injustificable de ese colectivo? ¿Es que ya no es posible organizar alguna forma de respuesta ciudadana contra los poderes que nos están devolviendo a los tiempos de la dictadura y encima humillan a quienes lo denuncian? ¿Es que sólo cabe esperar a ver qué pasa en las próximas elecciones?