“El Defensor” – 2015
El fossat de Santa Eulàlia. Monumento al president Companys en el lugar donde fue abatido por el fascio. (Fotografía propiedad de Jordi Puig) |
Cuando por fin llegaron al Fosar de Santa Eulalia, Companys se relajó de nuevo. Debajo de su fino bigote una sonrisa embelleció su rostro. Se despidió de todos los miembros de la comitiva de manera efusiva. A todos les dio la mano. Agradeció al cura haberlo confesado y haber oficiado la misa a aquellas horas. También le dio las gracias al comandante por el trato recibido durante aquellos días. Al juez le agradeció haber expedido los permisos especiales para que sus hermanas lo pudieran ver.