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lunes, 28 de octubre de 2019

El lobby bien engrasado: Miquel Iceta exculpa al neopaco Marlaska

Cuando se tomó esta fotografía Marlaska habló del "macho ibérico" sin que viniera a cuento su opinión.
La selección personal de Sánchez de sus 'ministras' indica su incapacidad política real
(El sueño de Pedro Sánchez es gobernar cuatro años con quien sea para 'jubilarse' con un momio como el de ZP)
(Él y su señora de Bilbao saben que en 2021 o antes se llevarán su nuevo colchón de la Moncloa al hades político)

martes, 1 de octubre de 2019

¿Es conveniente que el ministro del Interior sea un juez? ¿Por qué?

En la fotografía el juez Grande Marlaska con sus amigos de antes de ser ministro de Pedro Sánchez.
Este hombre - versátil políticamente - parece que no duerme por las noches
(Excesivamente politizado; algo extraño en un juez de la AN, ¿recuerdan cómo terminó el biministro Belloch?)

jueves, 6 de septiembre de 2018

¡A por ellos! Grande Marlaska es juez, y compañero del juez Zoido

Costó décadas recuperar el prestigio (dañado durante el franquismo) de la Guardia Civil y de la 'madera'.
Juegan con fuego estos 'jueces-ministros de interior', ¡Allá ellos! la UE muy pendiente

domingo, 10 de junio de 2018

'Pedro Sánchez puede avanzar si no se mete en charcos', por Elordi

Carlos Elordi
(Fotografía de 'El País)

Ahora en la política española se respira otro aire y hasta la gente menos politizada lo percibe claramente. Hemos avanzado, y hasta el momento eso es lo importante; tal vez lo único verdaderamente importante. De lo que no cabe duda alguna es de que la entrada en escena del nuevo Gobierno ha sido un éxito de imagen. Pedro Sánchez dio la campanada presentando una moción de censura imprevista y ganándola. Y la composición del nuevo gabinete parece haber sido pensada no sólo para que nadie pudiera horrorizarse, ni dentro ni fuera de España, sino también para generar una ola de simpatía e incluso de ilusión en el amplio y variopinto espectro social en el que potencialmente el PSOE podría obtener votos en un futuro. Es de prever que ese clima se mantenga durante algunas semanas. Porque los rivales no parecen estar en condiciones de aguar la fiesta a corto plazo y porque es de suponer que los socialistas evitarán, por ahora, meterse en charcos. Y hasta ahí llegamos. Porque hacer pronósticos sobre qué puede ocurrir a partir de la vuelta de vacaciones es, por el momento, prácticamente imposible.

Una amplia mayoría de la opinión pública se han alegrado de la caída de Rajoy y los suyos