MLFA - CMM
Profesor Generalitat Cat - 1986-2003
Experto Docente en Seguridad - ISM
Intérprete Jurado Admon de Justicia
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| El famoso cuadro "La càrrega" de Ramón Casas i Carbó. Los jinetes son Guardias Civiles con sable. |
Provoca vergüenza ajena al ciudadano del común – qué decir de los licenciados – comprobar, día tras día, la falta de preparación de la Fiscalía del Tribunal Supremo, y de la Abogacía del Estado (la letrada medio dormida en el estrado), en su ímproba tarea de convencernos del delito de ‘malversación’, dado que su coetáneo de ‘rebelión’ ya se ha perdido entre los pliegues de las togas de seda negra del Tribunal. Ello provoca un cambio de las reglas de juego que resulta estrambótico, irregular y, por ende, escandaloso; hasta el punto de que los observadores internacionales (que están en salón aparte, con pantalla plana modelo Rajoy), aporrean nerviosos los teclados y expanden por el mundo civilizado su absoluto asombro e indignación ante la farsa que tiene lugar en el antiguo convento de Las Salesas. Creemos que la sentencia será condenatoria por el delito de ‘conspiración para la rebelión’, algo que, en su absurda fabulación jurídica, pueda ser ‘aceptable’ para las cancillerías europeas. Esta es mi tesis, como los lectores conocen desde hace meses. Estos días me viene a la mente el juicio contra Mario Onaindía, en el que fue condenado a muerte injustamente, eso sí, con mucha educación; sólo hubo un mal gesto; el del juez togado militar que sacó el sable en medio de la vista; aquí no ‘sacan’ nada, ni tan siquiera los vídeos que delatan la represión policial.
“Si esta gente no se pone las pilas harán el ridículo” (Andréu Van Den Eynde, 22/03/19)
