El problema "judicial" en España no es responsabilidad que compete a los "justiciables"; estos son las víctimas de un sistema anacrónico, desconocido en el mundo occidental, y de unos jueces y fiscales "raritos" (los he visto llorar mientras preparaban las oposiciones). Están faltos de preparación para la vida en sociedad, "aislados" del resto de miembros de su comunidad, y son propensos a la "homogamia", precisamente debido a su dificultad para "socializarse" más allá de su propio círculo profesional. Por hoy; vamos a dejarlo aquí... ¡Seguiremos con el tema! Y lo haremos con objetividad y presentación de datos y situaciones reales. Lo que resulta evidente y hasta palmario, diría yo, es que este sistema de acceso a la judicatura, a través de las "oposiciones", ha fracasado; se te pueden "colar" imbéciles, fascistas, malas personas, tarados con trastornos de personalidad, solo necesitan tener "buena memoria", no he conocido ninguno con inteligencia emocional. Recuerdo un juez de Instrucción, en 2014, de unos 40 años de edad, que intentó "interrogarme" vestido con pantalón tejano con rotos en las rodillas, jersey ajado, y calzado con deportivas sucias. No respondí a ninguna de sus preguntas; archivó la causa. Es por ello que recomiendo a los imputados y a los procesados que se mantengan dignos y no se dejen "amedrentar" por algunos de estos jueces que se creen superiores. ¿En qué país civilizado se presenta un juez a interrogar al Presidente del Gobierno en su palacio presidencial? , pues en una España-banana, un país en el que la Judicatura -gran parte de su cúpula- sigue anclada en un franquismo redivivo. Tampoco olviden que a Europa "se la pela", para la UE somos 43 millones de clientes de coches y lavadoras, o lo hemos sido hasta que han llegado los chinos. El camino para que la ultraderecha acceda al Poder, lo curioso es que harán dos cosas buenas: poner a los jueces en su sitio (Ver caso Salvini en Italia) y poner en marcha un referéndum para abolir -así como suena- la Monarquía. No lo dicen públicamente, pero sueñan con "controlar" la Jefatura de Estado, republicana, por supuesto, y el correspondiente Primer Ministro, ambos de la ultraderecha.
A muchos les sobran los argumentos probatorios de acusaciones y defensas: ¡Ellos lo saben todo!
(Y es evidente que sufren rechazo social; el paradigma de su imparcialidad fue el Procés catalán)
(Aquellos fiscales destilaban 'odio' ello era muy evidente e impropio de una Justicia del siglo XXI)
(Quieren ser "jueces estrella" y bien conocidos pero no quieren críticas: ¡Terminan 'estrellados'!)
(Ya ocurría con Franco; y al final el sepelio se lo pagaba el ayuntamiento de su pueblo o ciudad)
(Los jueces en este y en muchos juicios destilan "displicencia" y un trato incorrecto al justiciable)
(Conozco bien el tema; el juez jubilado quiere jugar a la petanca: ¡Los vecinos clausuran el club!)
