lunes, 3 de noviembre de 2025

"Si el rico cebo es... la mujer de los 40 a los 50... ¡Me gustan a mí!"

MLFA - Promiscuo y pródigo, ha sido muy afortunado en el amor; un matrimonio convencional y dos relaciones estables legalizadas, amen de varios amoríos intempestuosos al tiempo que gratificantes. Hoy vive en la más absoluta soledad en su Ítaca del Estrecho de Gibraltar, y se considera "europeo fronterizo" y ciudadano universal. Mantiene relación a distancia con las mujeres que amó. "Eres la memoria de aquellos que has querido". (MLFA).

Begoña Gómez, esposa de Sánchez; aparece en este artículo por razón de su edad, sin relación alguna con el mismo.

Begoña Vilaplana, aparece en este artículo por razón de su edad, sin relación alguna con el mismo. Hoy ha ingresado por un ataque de ansiedad...

Esposa del convicto Correa, íntimo amigo de Aznar "El Facha", aparece en este artículo por razón de edad, sin relación alguna con el mismo.

No me negarán que -como diría Pablo Sorozábal en "La Tabernera del Puerto"- estas mujeres son granos de anís.
(Quede constancia de mi admiración y respeto por estas tres mujeres; obviamente no aparece la esposa de Aznar)

Mi amigo Bingen decía que "La mujer es un mal necesario", recuerdo a los lectores que Bingen era médico -de reconocido prestigio, por cierto- y que su aserto, llevado al absurdo, llevaba aparejados argumentos difíciles de refutar, aunque, obviamente, no se estuviera de acuerdo con el mismo, y, desde el inicio, advierto que no haré referencia a lo que denominan hoy en día como "diferentes identidades sexuales", mientras algunos, por contra, mantenemos que "trastornos sexuales" resultaría más apropiado. En el recuerdo "Sodoma y Gomorra" (El SIDA y la COVID han sido serios avisos) que pudiera estar al caer en su versión siglo XXI; de hecho, se atisban indicios preocupantes. Es evidente que homosexualidad, bisexualidad, lesbianismo y transexualidad atentan contra las leyes de la propia naturaleza. Ya les he advertido de que este artículo era duro -que se abrocharan los cinturones, como en el avión- algunas veces, cuando tengo problemas para evacuar, por razón de edad y/o por una alimentación copiosa, pienso en ministros, políticos, artistas y famosos de la televisión -cuya función pública debería ser "ejemplarizante"- homosexuales introduciendo sus penes erectos cual "gladios" romanos, en esos sucios túneles repletos de protuberancias y anillos bordeados de heces, y no puedo menos que sentir asco y repulsión, y, evidentemente, todo lo que estos tipos puedan "decir", no digamos "legislar", resulta más inane, si cabe, que el semen de un ahorcado. Los intelectuales que hemos rechazado de plano las enseñanzas bíblicas que hablaban de la mujer como "vaso sucio", nos encontramos con hembras que hunden sus muy largas y sucias uñas, las más de las veces, en los pliegues de otras hembras para hurgar en paredes blandas y tiernos conductos vaginales, con el fin de "arrancar" momentos de placer que, a menudo, no arriban; e intercambios salivares neutros como el jabón. Preocupa el aumento del lesbianismo en mujeres mayores de 55 años. En España 7 de cada 10 matrimonios terminan en ruptura, superando a Francia y Alemania. Hace 10 años eran 6 de cada 10.

Hoy, que están de moda las películas de "Terror" y de "Ciencia Ficción", no se van a asustar los lectores por la dureza extrema de este a modo de ensayo, real como la vida misma, acerca de la condición femenina. Este "suelto" no denigra a la mujer, como podrán comprobar. Hablamos de realidades contrastadas que afectan a un porcentaje elevado de mujeres de diferente condición social y económica, si bien, como es obvio, fijamos el foco en la clase media, a la que pertenecemos, y en el contexto de los años del "tardofranquismo" y primeras dos/tres décadas de la Transición. La familia convencional ha sido dinamitada, dejando muchas víctimas inocentes. ¡Pero ha sido positivo!

Quedan fuera de nuestro interés los jóvenes del momento, su apego por la pornografía y el abuso de la masturbación hasta llegar a desecar el glande, y su práctica del "mete-saca" raudo y veloz, contra el capó de un automóvil; de igual manera que no pontificaremos acerca de los numerosos embarazos no deseados que "destruyen" futuros vitales desde tempranas edades, y, por ende, sirven de caldo de cultivo para nuevos actos de violencia de género, esas jóvenes con barriga atendidas por unos padres que -al igual que sus pobres hijas- ven rota en mil pedazos su vida, ganada a pulso, padres necios que -para más inri- están en contra de la Ley del Aborto, actuación médica que permitiría "recuperar" sus vidas y, sobre todo, la de su joven niña; mientras el joven "follauret" continúa pajeándose con el puto móvil, y a la caza y captura de un nuevo "coñito" virginal. Urge "reconducir" una sociedad -la occidental- enferma de gravedad, y, sin violencia, expulsar de cargos de la máxima responsabilidad, política, social y cultural, a homosexuales y lesbianas, así como negar tajantemente, cualquier tipo de ayuda y/o asistencia médica, a quienes aspiren a la "trans-sexualidad", como he comentado más arriba. ¿Nos hemos vuelto locos? 

Ahora pagaremos las consecuencias; el gobierno de Pedro Sánchez es, en mi opinión, el mejor de la Transición del 78; pero da igual, la ciudadanía no soporta más gobiernos de izquierdas; votará a la derecha, por pura rabia, y el neoliberalismo gobernará nuestro país durante las próximas décadas, y los inmigrantes vendrán con "visado" o no vendrán, y los grupos LGTBI+ serán fustigados y perderán su puto poderío. Y los diputados y senadores serán gentes con "pasta" -para que no roben- como en Europa y en EEUU. Se me olvidaba: ¡Los maestros, médicos y otros funcionarios, no podrán ir al trabajo con los tejanos rotos y deportivas viejas! Y aparecerán más universidades y colegios privados, yo solo espero que haya becas para los alumnos brillantes de familias con pocos recursos. El resto se reconvertirán en un nuevo "lumpen proletariat", y a tomar por saco ¿Ok? Y los que disfruten del paro retribuido y de otras ayudas, tendrán que trabajar por cojones, no quemarse las retinas viendo series de TV en el sofá.

La madre naturaleza, en su infinita sabiduría, concedió a la mujer el derecho a "sentirse segura", ella debería velar y luchar por la salud, el bienestar y la seguridad de su progenie. No tenemos nada -faltaría más- en contra de ese derecho-mandatado. Pero conviene realizar determinadas apreciaciones, en referencia al uso indebido de ese derecho, en detrimento del hombre y sus derechos alícuotas. Resulta evidente ¿No? 

El feminismo -movimiento respetable al que debemos apoyar- no puede ignorar de ninguna de las maneras que miles y miles de mujeres priorizan -no solo su seguridad y la de sus vástagos- sino su propio "interés", en lo social y en lo económico, con una frialdad que asusta; y los hombres, idiotas, empiezan, por fin, a darse cuenta de quiénes son sus mujeres; el problema es que se han dado cuenta al final de sus vidas, cuando las necesitan por razones de salud, y son obligados a hacer de "esclavos" de hijos y nietos; en mis retinas aquel abuelo enfermo "empujando" el carro del nieto cuesta arriba y a diario; desde luego, no era una excepción. La sociedad española actual no es una Arcadia Feliz; sino una comunidad muy desorientada, y presa de miedos y angustias, y las mujeres, muchas mujeres, no se sienten constreñidas ni mucho menos responsables. ¡Coño!

Tras el período de enamoramiento, en edades de entre 20 y 22 años, nos unimos en matrimonio -hablo de los años "70" del siglo pasado- y fuimos dueños de una felicidad pasmosa, en la que ha tenido mucho que ver la atracción sexual, a veces impetuosa en el caso del varón, nunca en el de la hembra, salvo excepciones muy contadas, caso de mujeres hipersexualizadas, que llegaban a ser "mal vistas" por sus congéneres, más dadas al sexo plácido que culminaba, las más de las veces, en clara ausencia de orgasmo femenino, o "fingimiento" acerca del mismo; con expresiones tales como: "Me muero", o bien "Me vuelves loca", claramente falsas y dedicadas al "ego" del macho; este siempre "satisfecho", como es obvio para los lectores, dada su peculiar biología, muy diferente de la de la propia hembra, a resultas de lo que opinen las "chicas-chicos-chiques" de PODEMOS, quienes, por cierto, follan a discreción, eso sí, en diferentes apartaderos. Sin olvidar al "chiquet" de Valencia, "empalmado" en medio del huracán asesino. Un buen día nos dirá que ¡Él también estaba "mojado"! ya puesto a largar justificaciones...

Quiero hacer un inciso para reflexionar acerca del elevado número de mujeres "frígidas", algo muy grave de lo que muy pocas veces se habla. Hablaremos de ello más adelante. ¿Cómo solucionar ese problema tan grave? ¿Están las mujeres frígidas realmente "preocupadas"? No lo tengo muy claro, parece que se conforman con ser "admiradas" y/o "deseadas", es mi opinión, en calidad de experto en mujerío. El orgasmo es prescindible para muchas. Mavi querría una copa de vino y arrumacos, sin bajar al moro, y escuchar música. Mª Jesús quiere flores, muchas flores, y viajar, y busca al imbécil de turno; y así podríamos seguir "ad infinitum". Al final de la vida se constata que aquellas bellas hembras que aspiraban al poder, al dinero, y a la dominación del macho, resultan ser las víctimas, presas de la melancolía y, a veces, de la depresión. A menudo "amargan" la vida del hombre con sus quejas.

Y no quisieron ser "admiradas" por su pareja, y mucho menos "admirar" al hombre de su vida.
(Constatamos el gran número de mujeres con sentimientos básicos: ¡La maternidad, poco más!)

A los veintitantos ya teníamos los españoles, como mínimo, la parejita, algunos tenían tres hijos; el tercero solía ser un fallo, es decir un nuevo hijo "indeseado" o "no buscado", eso sí, muy bien "querido", algo lógico y normal en una familia como han sido las nuestras. Reitero las edades, y añado que nuestros matrimonios se componían de parejas de parecida edad, algo que, con el paso de los años, se ha demostrado que fue un error, un gravísimo error, producto de la sociedad española de la época. En mi opinión, debe haber una diferencia de edad de entre 12 y 15 años. Hay una excepción, la del presidente francés Macron y su esposa muy mayor y madre, claro que... ¡Así va Francia, el país de la "grandeur"! Y la bofetada "al hijo" en el avión...

Tras dos maternidades, constituida la "familia" convencional, la mujer "enfriaba" su deseo sexual antes de los 30 años, algo inaudito; y daba comienzo la retahíla bien conocida: "Me duele la espalda", "Estoy muy nerviosa, estresada por los niños", (etc. etc.), en definitiva, una enorme mayoría de mujeres "evitaba" la práctica sexual, ya no le gustaba que el marido la "desvistiera" de forma más o menos impulsiva; al respecto recuerdo a una pareja de amigos: Rosa era una mujer "bandera", empresaria en ciernes, y él, Alfonso, era médico; una vez arreglados y ya a punto de bajar al garaje para acudir a una cena (eran frecuentes las cenas entre matrimonios amigos). Lo recuerdo como si fuera hoy mismo; el tipo la desvestía de forma impetuosa, arrancándole la ropa a empellones y penetrándola con inmediatez. Ella lo denunciaba en las reuniones con las amigas; es evidente que a los 30 años, nuestra amiga ya no sentía deseo sexual. Y el tipo era un cabrón.

Respecto de las "amigas", con maridos normales, hemos de decir que, a esa edad, también habían sentido una reducción de su deseo sexual, y, antes de los 35, lo habían hecho desaparecer del todo. Hablamos de miles de mujeres "jóvenes" despreciando el sexo; de ello podemos inferir que no habían sido "educadas" para el goce y disfrute del mismo. Sino como un medio para la fecundación y consiguiente "constitución" de una familia, con arreglo a los cánones imperantes en aquella época. En mi caso fue a los 33. Expectativa de vida: 82 años.

La BERREA del ciervo dura de 2 a 5 semanas; la del macho español hacia su fantástica hembra treintañera, viene a durar un determinado número de sábados.

Jóvenes y atractivas esposas que no llegaban a desvestirse del todo, que se negaban a prácticas -perfectamente normalizadas en la civilización occidental- tales como la "fellatio" o el "cunnilingus", que, a nuestras mujeres, les parecían "marranadas", y, en definitiva, llegaban al abandono personal -batas de felpa o de seda, zapatillas cameras, y pijamas o camisones- daba la impresión de que el interés que ponían en "arreglarse" para salir de casa de compras o para acudir al trabajo, tenían como objetivo el tratar de ser "admiradas" y/o "deseadas", algo que caracteriza a las mujeres "frígidas" en los manuales psicológicos. Evidentemente, en casa no sentían esa necesidad, al contrario -pensaban muchas de ellas en sus retorcidas mentes- ¡Cuanto menos atractiva esté mucho mejor! No deseaban "excitar" al marido.

Me viene a la cabeza otra historia, esta es para no dormir; Jordi se acostaba antes que su mujer, Esther, y doblaba la almohada bajo su cabeza, a la espera de que llegara su mujer, esta se quedaba viendo la TV a la espera de que el marido se durmiera (edades: 37 y 33 años), para evitar el coito. Se deslizaba sigilosamente entre las sábanas y no tocaba para nada la almohada; por la mañana el marido se levantaba con una tortícolis impresionante. Real como la vida misma, y el tontaina aquel se lo contaba a los amigos.

No era plato de gusto intentar "convencer" a la mujer para que se bajara las bragas... ¡A disgusto!
(Muchos trabajadores se gastaban los "sobresueldos" en los "puticlús", hasta que llegó el SIDA)

Llegaban -a finales de los años 90, incluso antes- las separaciones y divorcios; dejaré aparte el tema de los hijos, ellos se volvían a enredar con mujeres de entre 12 y 15 años más jóvenes que ellos; me vienen a la cabeza muchos, diría que muchísimos, pero hablaré de Alberto, su mujer es 18 años más joven que él (77 y 59), y en mi caso Ana, 18 años más joven, con la que mantengo relación de amistad eterna (tiene 3 hijos con su ex marido) y Mª Rosa, 17 años más joven, curiosamente, soy el padrino de su hijo, por la religión católica, al ser italiano.

Volvamos al titular, a las divorciadas y separadas que quedaban en las lindes, por su mal querer.

Estas mujeres -que constituyen legión- eran conscientes de que seguían siendo atractivas a los 45 años, y a los 50, no digamos las de 40 años, y comenzaban la busca y captura de nuevo "hombre de su vida", o quizás deberíamos decir "de muerte", a las puertas de la menopausia ellas, y ante la cercana vejez ellos. Desplegaba sus artes de amar, lo de "amar" no está claro porque ellas no volverían a amar, de hecho no sabían amar. Recomiendo "El arte de amar" y "Miedo a la libertad" de mi autor de cabecera Erich Fromm.

Una vez conocido y "atrapado" el nuevo hombre, desenfundaban el "clítoris" cual daga conminatoria y apetecible, y aceptaban aquellas prácticas "asquerosas"; algunas de ellas -buenas personas, no lo dudo- llegaban a "tragarse" el semen, por desconocimiento, y corrían despavoridas al lavabo en busca del colutorio. Eso sí, lo de la "fellatio", no más de cuatro/cinco veces, tras las cuales se escaqueaban, si podían.

No habían aprendido de sus errores y volvían a cometerlos: Dominación y falta de sentimientos.
(Se evidencia que el sexo no es una prioridad para cientos de miles de mujeres españolas)

En definitiva; en esa segunda oportunidad, estas mujeres, hermosas todavía y, prácticamente menopáusicas, trataban de "amarrar" al nuevo hombre; algunas lo conseguían. Conviene aclarar que, cuando mencionamos la "menopausia", lo hacemos con respeto exquisito. Son ellas las que "utilizan" la menopausia como nueva "excusa" para evitar el sexo: Mavi de 49 años a un servidor, mientras me "pretendía": "He entrado en la menopausia y no puedo practicar sexo por encontrarme seca...", mi respuesta: "Yo te lubricaré con mi saliva...", aquella fue mi última conversación con la que fue mi amor de niñez en Tudela. Ya ven que prefiero hablar de mis múltiples experiencias, no cometeré el error o el atrevimiento de hablar en nombre de los demás.

Amigos y compañeros de pupitre continúan felices con sus primeras esposas; se ha de respetar.

¿Quiénes eran "Las Petroleras"? Pues eran mujeres parecidas a las de las fotografías. Se reunían en el hotel "Los Tamarises" de la playa de Ereaga en Guecho (ahora se escribe Getxo). En la cafetería del hotel nos reuníamos los "pijos" de Algorta y los "cachorros" de las grandes fortunas de Neguri, así como mujeres separadas (no había divorcio); era el tiempo de la serie "Dallas", sobre la vida y milagros y divorcios de las familias USA propietarios de las grandes empresas petroleras, de ahí que se las llamara "Las Petroleras".

El hotel "Los Tamarises" en la actualidad; las "petroleras" serán octogenarias o habrán fallecido. ¡Descansen en paz!

Evidentemente; el elevado número de "víctimas", hombres y mujeres, son responsabilidad directa del "Franquismo", y el colaborador necesario fue el "Felipismo", porque mantuvo vivas las costumbres retrógradas del Estado español y de la Iglesia Nazional-Catolicista.

Sobre las mujeres... mi agradecimiento hacia todas las que amé, dejando patente que su praxis es francamente mejorable. ¡Prefiero envejecer en soledad! ¡Lo juro!

Esperamos debate muy duro en los 2 correos; será privado, no se publicará.