Luz de Gas - Magistrada de Instrucción, Barcelona.
Los "pogroms" sufridos por los judíos en diferentes países europeos, en particular en Rusia y Polonia, sin olvidar su expulsión de España por los Reyes Católicos, culminaron en el Holocausto de su raza -hoy diríamos "limpieza étnica"- por parte del régimen (reich) del "iluminado" Adolf Hitler, con aquiescencia de la ciudadanía alemana, entre los años 1935 y 1945. Los judíos fueron diezmados, masacrados, y llevados al martirio como raza impura y peligrosa para la civilización cristiana.
No debemos ignorar que la civilización "cristiana" no es tal; sino que es "judeo cristiana".
Cada vez que leemos la Biblia comulgamos del "judaísmo" que la impregna; nos guste o no.
Entre 1945 y 1948 los judíos lucharon contra la Gran Bretaña, "dueña" de Oriente Próximo, y lo hicieron con valentía y pundonor -amén de con atentados terroristas- y el conjunto de naciones vio con admiración como se conseguía la independencia de Israel.
Las diferentes guerras entre los judíos y sus vecinos palestinos, jordanos y egipcios -que todos los lectores recordarán- fueron apoyadas por el llamado "Occidente", por los países que lo componían; en especial por europeos y norteamericanos. (Franco era antisemita, debo recordarlo aquí y ahora).
Durante muchos años fueron gobernados por una suerte de "socialdemocracia" que les permitió llegar a acuerdos con países árabes, y acceder el progreso jamás alcanzado por los países del área, de aquella tierra "Santa" o "Bíblica". Es, a partir del nacimiento del partido "Likud" de Netanyahu y otros partidos de derecha satélites, cuando el Estado de Israel deviene en imperialismo "sionista" y se extiende, o trata de extenderse, a través de tierras árabes en manos de los palestinos.
Curiosamente; los palestinos son la élite de todas las facciones árabes de aquella zona.
Israel los convierte en los enemigos a exterminar, como hicieron los alemanes con ellos.
Occidente seguía sintiendo admiración por Israel; se tenía en cuenta el espíritu emprendedor y laborioso de los judíos, habían convertido el desierto en un vergel. En la España de la Transición, muerto el caudillo antisemita, se contó con ellos para convertir en (muy) fértiles las tierras de Almería (conocida como tierra de las legañas, enfermedad asociada a la pobreza extrema), fueron ellos quienes instalaron modernos sistemas de regadío y los cultivos bajo plástico. En Barcelona llevamos tres décadas viendo pasar caravanas de 25/30 camiones frigoríficos, pegados unos a otros -no hay forma de adelantarlos en la autopista AP7-, cargados de frutas y verduras, con destino al Centro y al Norte de Europa, todas las noches del año, además de cientos de trenes y docenas de barcos cada año; todos ellos procedentes de Almería. Hablamos de las frutas y verduras de la mejor calidad del mundo... ¡Pregunten a nuestros turistas nórdicos en la playa! Ya han vuelto.
Netanyahu "el corrupto", apoyado por los judíos "ultraortodoxos" ha dinamitado el sueño de 1948 y el prestigio de su raza. El genocidio de "GAZA" permanecerá en la memoria colectiva para siempre.
Los líderes ultraortodoxos, vestimenta y estilismo incluidos, son los "ayatolás" de Israel.
