MLFA
Actualizado el 10/02/17 a las 09:45 horas
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Fotografía de 'Asociacionismo' |
El sistema de control fue puesto en marcha en España por el PSOE,
partido más parecido a una Falange deslavazada que a una institución de corte
democrático y que la historia juzgará con dureza; nos referimos al nuevo
socialismo, que nace al mismo tiempo que la Transición de 1978 y que ha
resultado ser una alternativa ‘pactada’ con AP-PP para repartirse el poder
‘real’ en los territorios que componen la España
‘desvertebrada’ (no confundir con ‘La España invertebrada’ de Ortega y Gasset).
UGT se nutrió de cuadros y metodología del sindicato vertical y el PSOE de
falangistas en miles de pueblos del centro y SW español. Pero hoy no toca
hablar de ello, sino de los funcionarios y (sobre todo) de los famosos ‘contratados
laborales’, figura ‘ad hoc’ para lo que tramaban; innecesaria,
administrativamente hablando, ya que existía la específica de ‘funcionario
interino’, para cubrir necesidades temporales perentorias.
El contratado laboral es un
hijo putativo del nepotismo y la política partidista