MLFA
Diáspora vasca
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| Definir al héroe Ortega Lara como 'extrema derecha' es propio de necios |
VOX no es un partido de extrema derecha; podrán etiquetarlo como tal pero yerran en el empeño, lo cual no hace otra cosa que beneficiarles electoralmente. Hoy vamos a desentrañar los orígenes – la génesis – de este partido y la base de sustentación del mismo, base o cimiento nada desdeñable para quienes conocemos a las víctimas y para los que nos vimos obligados a abandonar nuestra tierra sagrada, martirizada por los hijos y sobrinos de unos nacionalistas vascos (los del PNV) que se echaron al monte y sembraron el terror, única y exclusivamente, por intereses espurios; Euskadi es hoy una de las regiones más prósperas de Europa gracias al desarrollo alcanzado por el trato diferencial recibido del Estado; temeroso, su alto funcionariado, de la razzia emprendida por la banda terrorista ETA, desde 1964. Las nueces de Arzallus estaban pringadas de sangre y valían su peso en oro. Ese territorio que, muchos de los que marchamos entonces, contemplamos hoy con absoluta indiferencia. Ayer domingo de Pascua (El Aberri Eguna del bestia Sabino Arana) reíamos con la farsa montada por el calvorota Ortúzar y su atildado lacayo Urcullu y las proclamas de la nada de ambos. Pero volvamos a los de VOX, que hoy nos toca analizar este partido, amenazante pero absolutamente democrático. Partido que obtendrá, el próximo domingo, entre 30 y 35 diputados en el Congreso, amen de varios senadores que no somos capaces de cuantificar. Ese progreso – morir de éxito – que obliga a muchos vascos a emigrar, al no poder hacer frente al elevado (e injustificado) coste de la vida en esa tierra.
Los ‘jubilatas’ saben de sobra que no se puede vivir en Euskadi y habrá una nueva diáspora
