El "embargo judicial" como arma de destrucción masiva en España

MLFA 
‘Embargado’ desde 2014, 8 demandas por denunciar corrupción 

‘Insolvente’ legal desde 2004, por ‘crack’ financiero insuperable 

Periodista digital de éxito desde 2005 y escritor desde 1960 

Aclaraciones pertinentes; este artículo no afecta directamente al autor, sí a muchos españoles 

Desde el preciso momento en que se interpone una demanda judicial contra un ciudadano español, éste entra en un infierno financiero inimaginable; importa poco si la demanda está justificada o motivada; comienza la fase de Instrucción y, aunque no se dicta orden de embargo preventivo, de facto el justiciable queda (desde ese momento) con las manos (financieras) atadas y bien atadas. Esta legitimado para prácticas de comercio, como comprar y vender; realizar donaciones, inversiones, vender su vivienda, cambiar de automóvil o regalar un vehículo o diversos electrodomésticos a hijos e hijas, también comprar un apartamento a su amante. Pero la realidad es muy diferente; si al final del procedimiento, 9 años después, el acusado resulta ‘condenado’ al pago de multas elevadas y, sobre todo, de indemnizaciones por responsabilidad civil, y se declara ‘insolvente’, la acusación le demandará por ‘alzamiento de bienes’ y tratará de demostrar que la ‘insolvencia’ (del cabrón) es ‘punible’. ¡Alguien que realizó prácticas comerciales encaminadas a ‘esconder’ sus bienes desde que le pusieron la demanda! 

Ello a pesar de que el demandado durante la Instrucción no había sido ‘embargado’, pero…